
Más de un centenar de efectivos policiales participaron ayer jueves del operativo que permitió desmantelar una red de comercialización de estupefacientes en Oberá. Fueron doce los allanamientos ordenados por el juez Federal, Alejandro Marcos Gallandat Luzuriaga y que finalizaron con catorce detenidos, entre ellos el cabecilla o líder conocido como “Man” de 31 años.
Pocos minutos antes de las 6.30, en el barrio 180 Viviendas se desplegó el procedimiento que permitió la aprehensión del presunto jefe de la organización que distribuía cocaína, marihuana y LSD con servicio de “delivery” en motocicletas o también en los puntos señalados como narcokioscos.
De acuerdo a fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, por la cantidad de sospechosos que fueron demorados e incomunicados a disposición del juez Gallandat, es el golpe al narco más destacado de los últimos años por parte de la fuerza de seguridad provincial.
En los doce allanamientos se secuestró droga, celulares, armas y vehículos. En la vivienda donde fue atrapado “Man” junto a su supuesto ladero o primer subalterno, alias “Nacho” (28), fue incautada una camioneta Ford Ranger, un automóvil, armas, cocaína y marihuana fraccionadas para la venta, una balanza electrónica y dinero en efectivo en billetes de distinta denominación.
En este operativo fueron secuestrados dos ladrillos de cocaína de alta pureza, de acuerdo a los test con reactivos. Las fuentes remarcaron este punto y lo vincularon con los valores o precios que exigían por cada “bolsita” o dosis: alrededor de dos mil pesos el gramo.
La investigación fue iniciada por integrantes de la división Drogas Peligrosas de la Unidad Regional II hace siete meses e incluyó seguimientos a cada sospechoso que se iba conectando a la actividad delictiva. De esta manera se colectaron grabaciones o registros en imágenes de doce presuntos miembros de la red de comercialización.

Un “jefe creyente”
En la vivienda donde fueron atrapados “Man” y “Nacho”, llamó la atención la cantidad de simbología religiosa. Esculturas y fotos impresas de Jesucristo y una biblia en la que se guardaban hojas se cannabis sativa, fueron parte de los elementos secuestrados relacionados con el cristianismo.
Los restantes procedimientos fueron en inmuebles de las calles Vélez Sarfield (entre Colombia y Paraguay), Colombia y Justo Santa María, Roca casi Concordia, Noruega al 300, Río de la Plata, Parque Nacional Baritu y Espíritu Santo, complejo habitacional Oberá VII, calle Aramburu, barrio Villa Barreyro y avenida De los Inmigrantes y Río Pilcomayo.
Se secuestraron cuadernos y anotadores con direcciones de posibles clientes y proveedores, más de treinta teléfonos celulares, estupefacientes, armas, municiones y motocicletas, entre otros, elementos para ampliar la pesquisa.