La inseguridad, la falta de iluminación y la poca respuesta, tanto del municipio de Garupá como de los funcionarios policiales, tiene a los vecinos de los barrios 90 Viviendas, 140 Viviendas y Altos del Paraná en alerta.
Es que los tres barrios están cerca uno del otro y de un tiempo a esta parte viven situaciones preocupantes de inseguridad, con muchos robos y vandalismo, entre otros hechos. Las comisiones vecinales plantearon los problemas tanto al Foro de Seguridad de Garupá, como a la comuna e incluso se reunieron con efectivos de la Policía Provincial el viernes pasado.
Lorena, quien reside en el barrio 90 Viviendas, contó que “en la cancha de fútbol del barrio se juntan muchachos a beber, fumar y hacer fogatas, no tienen horario, a veces de día y a veces de noche. La cancha, que es parte de la plaza, está destrozada. No sabemos si hay consumo de sustancias, eso es lo que nos preocupa, porque se vienen dando muchos hechos de inseguridad y robos, por ejemplo hace unos días la hija de una vecina volvía a su casa y fue atacada por un chico del barrio que la golpeó porque quería plata; se hizo la denuncia, lo atraparon y unos días después ya estaba en las calles de nuevo”.
“Nosotros hicimos notas y presentamos al municipio pidiendo varias acciones, por ejemplo, hay un vecino que es mecánico y tiene muchos autos chatarras acumulados afuera, en la calle, y sabemos que son usados por los delincuentes para esconderse, por eso pedimos al municipio que hable con el vecino y se saquen los vehículos de ese lugar. También enviamos una nota a Energía de Misiones por el tema iluminación en la plaza del barrio. El proyecto decía que la plaza tendría siete farolas, pero sólo pusieron dos de las cuales sólo funciona una. La plaza es una oscuridad total y es un peligro. Además la única farola que tiene está casi tapada por las ramas de un árbol, por eso pedimos a la comuna y a Energía de Misiones que realicen la poda o que cambien de lugar la luminaria y agreguen más, pero hasta hoy no hubo respuestas ni de la Municipalidad ni de la empresa de energía”, agregó la vecina.
Además contó que el viernes pasado tuvieron una reunión con efectivos de la Policía de la Provincia. “Mediante el Foro de Seguridad pudimos reunirnos con la Policía, pero terminamos sin respuestas concretas, otra vez. Les pedimos más presencia policial, que se hagan operativos, que venga la gente de Toxicomanía, pero no tuvimos una respuesta favorable. Ellos afirman que se manejan por estadísticas de denuncias, y que desde principio de año hasta ahora en esta zona sólo hubo tres denuncias por hechos delictivos. Nosotros sabemos que hay muchos robos, suponemos que los vecinos no denuncian, no sabemos por qué. Igual, la Policía nos dio sugerencias, como que nosotros atrapemos a los delincuentes y los retengamos mientras ellos llegan, o que utilicemos el sistema de otros barrios con silbatos. No es una respuesta aceptable, porque no podemos salir a detener a nadie, no sabemos si están armados o qué, poner en riesgo la integridad física de los vecinos no es una opción, así que no fue de mucha ayuda la reunión”, explicó.
Así las cosas, los vecinos siguen preocupados y analizan qué más pueden hacer para ser escuchados y dejar de vivir con temor. Afirman que esta zona creció mucho y con ese crecimiento llega también la inseguridad.