El 6 de julio de 1997 eran encontrados en una fosa común en Vallegrande (Bolivia) los restos del guerrillero argentino-cubano Ernesto “Che” Guevara.
El revolucionario había sido herido y tomado prisionero en la Quebrada del Yuro el 8 de octubre de 1967 y un día después a las 13:10 fue ejecutado por militares bolivianos en una acción orquestada por la CIA.
En 1995 el médico cubano Jorge Gonzales Pérez viajó al país mediterráneo en busca de los restos del guerrillero. Entre diciembre de ese año y marzo de 1996 hallaron los restos de cuatro compañeros que habían sido abatidos semanas después que el “Che”.
Pero hubo que esperar más de un año hasta hallar la fosa común donde estaba Guevara. El Equipo Argentino de Antropología Forense ayudó en su identificación.
Casi una semana más tarde, los restos fueron recibidos con honores por Fidel Castro en Cuba, donde fue inhumado definitivamente.