Los paradigmas sobre el éxito están inmersos en la mentalidad de la mayoría de las personas, esto genera una creencia popular que es difícil o imposible tener éxito.
Estas creencias están cambiando con el crecimiento y logros que experimentan las personas en distintas áreas de su vida.
Pero ¿Qué es el éxito? Es la consecución de acciones diferentes cada día, de lo que hace el resto de la gente. Con esta perspectiva se puede comprender si le ponemos el plus de la actitud más los hábitos que sean necesarios, hay grandes posibilidades de saborear el éxito que anhelas.
Cuando se hacen las acciones extras con el ímpetu que requieren, la persona se encamina hacia su éxito personal, sintiendo que su propósito está en marcha, se genera un sentimiento de júbilo.
Los tropiezos también forman parte del camino al éxito, porque te hacen más fuerte y sabio, aprendes a levantarte y hacer de manera distinta la acción hacia el propósito, se puede decir que el éxito se logra con errores y aciertos, sacando el aprendizaje para redireccionar el proyecto que esté en curso.
Mirando desde otro lugar las situaciones cotidianas experimentas el éxito, desde leerte una hoja de tu libro preferido, ver que se elevó y sentir el aroma del bizcochuelo recién horneado; saber que terminaste tu pulóver o saco tejiendo a mano, son logros personales que te hacen éxito en tu diario vivir.
Por lo tanto, no hay duda que puedes con actitud positiva y esfuerzo, dedicándole todos los días la acción indispensable para lograr el éxito.