El fiscal de Instrucción 3 de Puerto Iguazú, Horacio Paniagua, requirió la elevación a juicio oral por “homicidio calificado con ensañamiento en grado de tentativa” para un ciudadano rumano, actualmente con prisión preventiva.
Fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN indicaron que el pedido fue presentado durante los últimos días y la defensa del imputado tiene hasta el 13 de octubre para presentar una apelación.
De acuerdo al expediente que está en manos del juez de Instrucción 3, Martín Brites, la víctima del ataque es una mujer de 71 años, oriunda de Neuquén y que estuvo internada en coma durante varios días en Posadas, en el Hospital Ramón Madariaga.
Graciela Álvarez es una docente jubilada que se encontraba de paseo por Misiones cuando fue atacada. Si bien se analizó que el hecho correspondió a un intento de robo, finalmente está cuestión nunca fue acreditada, consignaron las fuentes.
La mujer fue atacada durante la noche del jueves 9 de junio cuando salía de un restaurante ubicado sobre avenida Misiones, en pleno centro de Puerto Iguazú, donde fue de paseo junto a una prima y una amiga.
En esas circunstancias, el rumano quien había ingresado a través de Foz de Iguazú el lunes 6 de junio, la atacó con un pedazo de cemento o adoquín, elemento con el que la golpeó en forma reiterada, incluso cuando ya estaba indefensa y tirada en el piso, de acuerdo a la versión policial.
Desde ese momento, la mujer estuvo internada en terapia intensiva y en estado de coma luchando por su vida, primero en el Hospital Marta Teodora Schwartz de Puerto Iguazú y luego en Posadas.
Evolución y traslado
La evolución del cuadro, que incluía traumatismo de cráneo más fractura y hemorragia intracerebral, entre otras lesiones, fue favorable y logró ser estabilizada para su traslado a Neuquén, concretado el martes 28 de junio.
En ese momento, una hija de la mujer fue quien tomó contacto con medios periodísticos de Misiones para explicar el día a día de la docente.
Acerca de las últimas novedades que trascendieron acerca de la víctima, se sabía que comenzó su tratamiento de rehabilitación en su provincia, donde se calculaba otra internación de no menos de 60 días aproximadamente, hasta su recuperación.
“Está con un cuadro de amnesia total, respira y come por su propios medios. Además ya puede hablar y estamos esperando su rehabilitación, su evolución”, indicó Mariana Bayo, hija de la jubilada días posteriores a que llegue a Neuquén.
Antecedentes
En cuanto al atacante, se supo que provenía de Rumania y tiene 31 años. De acuerdo a los datos migratorios de su arribo a Misiones, trascendió que ingresó al país el 6 de junio, a través de la frontera con Brasil, con su pasaporte y sólo mil pesos en la billetera.
Una vez conocido el hecho, efectivos de Investigaciones de la Unidad Regional V de Puerto Iguazú, comenzaron a indagar sobre sus antecedentes y se supo que no era la primera vez que pisaba la tierra colorada y tendría antecedentes por episodios relacionados a hurtos y arrebatos, mayormente callejeros.
Las mismas fuentes consignaron que al momento de su detención, el hombre dio, a las autoridades que investigaban el caso, dos domicilios falsos: uno de Puerto Iguazú y otro en la provincia de Buenos Aires.
Finalmente en ninguno de ellos se acreditó su residencia, por lo que no se pudo establecer contacto con algún allegado, amigo o familiar.
El fiscal Paniagua de acuerdo a la instrucción realizada por el juez Brites solicitó una serie de pericias psicológicas y psiquiátricas al rumano para determinar su imputabilidad. Se informó que el acusado sabía de alguna manera la acción que llevaba a cabo, ya que su defensa en aquel momento intentó instalar un posible cuadro de esquizofrenia, algo que no fue probado.
De acuerdo al encuadre legal, la imputación al detenido quedó contemplada por el artículo 80 inciso 2 (ensañamiento y alevosía) del Código Penal Argentino, con posibles condena de hasta quince años de prisión efectiva.