La baja rentabilidad que viene otorgando la producción de té, en los últimos años, está llevando a muchos productores a “tumbar” sus plantaciones y reemplazar por otras siembras: yerba mate en la zona centro y soja o maíz en el Alto Uruguay.
La tendencia se registra desde principio de año y no se detiene por tres motivos: no hay expectativa de que mejore la rentabilidad del té, las ganancias de los últimos años fueron muy bajas debido al retraso del dólar oficial (teniendo en cuenta que el 99% del té se exporta) y por el buen momento económico de la yerba.
Cristian Klingbeil, presidente de APAM, sostuvo que “los que hacen el servicio de eliminación de teales dicen que como nunca tienen pedidos de turno para erradicar teales, el panorama no es alentador, cada vez más gente decidida a la eliminación”.
En declaraciones a PRIMERA EDICIÓN agregó que “estos días fue un productor de 20 hectáreas, con maquinaria y camión, con su plantación cerca del secadero. Quiere decir que no sólo eliminan los chicos de 4 a 7 hectáreas, también los que tienen superficies más grandes. Es que los números no cierran”.
La opción es la yerba
Los que eliminan, en su gran mayoría, se inclinan hacia la yerba mate. Algunos lo hacen con soja pero en la zona del Alto Uruguay.
“Esto preocupa porque lo que hoy estamos haciendo con el té, después vamos a terminar haciendo con la yerba. No se le puede decir al colono que no plante yerba pero en algunos años va a sobrar yerba y no va a valer lo que vale ahora”, vaticinó.
“Lo que sorprende es que haya gente grande que caiga en esa decisión porque todos recordamos los ciclos que tuvo la yerba, las épocas donde no valía nada y se regalaba a cambio de cortar los yerbales para que mantengan la forma”, se lamentó Klingbeil.
Y advirtió que “los depósitos se están cargando de yerba. Hay stock para diez meses, pero todos sabemos que cuando el stock supera los once meses ya empieza desequilibrio que perjudica al productor”.
Dijo que “ya están empezando a pagar con cheques a 90 días, esto ya lo vivimos cuando tuvimos cheques a 300 días, toda esa timba financiera cuando sobra yerba la termina pagando el productor”.
Fertilizantes y zafra
Klingbeil explicó que los productores están recibiendo el fertilizante del Ministerio del Agro y el 5 de octubre habrá una reunión de la Comisión Provincial del Té.
En el mismo sentido, la subsecretaria de Desarrollo y Producción Vegetal, Luciana Imbrogno indicó que los temas a tratar serán “precio del té en rama y avance de distribución de fertilizantes”.
“Por semana enviamos entre 16 y 20 camiones con 28 toneladas cada uno de fertilizante para productores de hasta 10 hectáreas. Son ocho bolsas de 25 kilos por hectáreas, es decir 80 bolsas para cada productor”, dijo la funcionaria.
Estimó que la zafra comenzaría a mediados de octubre porque “hubo heladas tardías” y ahora los productores están fertilizando y haciendo desmalezamiento.
Sobre el fertilizante, explicó que “es un apoyo del gobernador Oscar Herrera Ahuad a los productores y representa un costo importante”. Contó que “cada bolsa cuesta en el mercado entre 5 y 6 mil pesos”. Cada productor recibe 80 bolsas, equivalente a 480 mil pesos, el 66% está subsidiado por el Gobierno y el 33% lo tiene que reintegrar en abril de 2023, cuando cobra por el té vendido. Lo que debe reintegrar equivale a 160 mil pesos “sin intereses”.
Además se compensa a las 54 industrias que funcionan en la provincia con subsidio de 30% de tarifa eléctrica durante la zafra y la posibilidad de hacer uso de los saldos a favor de rentas.