A menos de una semana de tomar estado público una denuncia por situaciones violentas hacia alumnos de un primer grado de la Escuela Normal Mixta, continúa el proceso de investigación del sumario y verán si existieron casos similares que involucran al mismo docente.
La acusada, quien además de maestra tiene un cargo jerárquico en la institución, para obligar a que dos alumnos dijeran la verdad sobre una falta de conducta en el aula, acercó un fósforo encendido a la cara de los niños. Al enterarse de lo sucedido, los padres concurrieron a los directivos para pedir una intervención inmediata.
En investigación
La directora de Enseñanza Primaria del Consejo General de Educación, Dora Gallardo, contó en Radio República que en la actuación “se tomó en cuenta sobre todo el resguardo de los menores. En este caso se procedió a la separación preventiva y provisoria de la docente”. Desde entonces, “se inició el proceso de investigación a través del sumario administrativo”.
Respecto a la docente, detalló que “en una primera reunión con los padres, la docente no estuvo presente y en una segunda reunión les pidió disculpas”. Asimismo, adelantó que este episodio “amerita un análisis más profundo de la situación, si hubo otros antecedentes o situaciones similares a esta. Esto va a llevar un proceso de investigación”.
Gallardo aclaró que en comunicación con otros colegas y padres “comentaron sobre situaciones que podrían haber sucedido anteriormente”. Acerca de la docente implicada, “estuvo en otros grados y tengo entendido que la colega tiene un cargo jerárquico en la institución”, agregó.
En este proceso, señaló que “debemos llegar hasta las últimas consecuencias por lo grave de este hecho. Son niños de primer grado, que están iniciando la escolaridad y sufrir este acto de violencia hacia ello es algo que no tiene que volver a ocurrir”.
Remarcó que desde el CGE “se tomarán todas las medidas útiles y necesarias para que esto no vuelva a ocurrir”. En cuanto al dictado de clases en este grado, aseguró que “los niños están yendo a la escuela, asistidos por un docente de la misma institución. Con el director del Nivel Superior hicimos un análisis de la planta funcional, un reordenamiento dentro de la institución y hay un docente a cargo de estos alumnos de primer grado”.
La directora de Enseñanza Primaria recordó que en los primeros días tras el incidente “los chicos estaban horrorizados por la situación que vivieron y se entiende la preocupación de los padres de resolver de forma inmediata esta situación”.
Entre las recomendaciones para los tutores de los chicos, Gallardo respondió que “cuando pasa algo en la escuela, el niño va y cuenta a su mamá, papá, y los padres deben estar atentos, acercarse a la escuela para hablar con los directivos y docentes”.
De la misma forma, resaltó que “los supervisores deben intervenir inmediatamente si hay una queja o algo que los padres consideren que no está bien dentro de la escuela”.
Para un resguardo de los menores, resaltó que es importante que “si el alumno va y cuenta algo al maestro, porque tiene confianza, este docente debe estar atento a cualquier situación que pueda surgir, dentro de la escuela o fuera de ella, para interceder de forma inmediata”.
En el rol que debe cumplir la escuela, afirmó que “cuando el alumno ingresa, nuestra responsabilidad es que el niño se sienta seguro, esté feliz y aprenda lo que necesita”.