El máximo aumento registrado en los últimos doce meses, midiendo todos los rubros desde noviembre de 2021 a noviembre de 2022, fue encabezado por el kilo de cebolla que creció un 466,7%. Otros aumentos elevados se observaron en el kilo de batata (350,8%), papa (270,1%), y la bolsa de kilo de azúcar (221%). En los cuatro casos se consigue producción local dentro de la provincia, pero tan escasa que no alcanza a cubrir ni una porción de la demanda de la población. La batata es lo más disponible entre los productores de las ferias francas.
También se observaron aumentos altos, de más del 100% anual en leche, aceite, carne, harinas, productos de tocador, artículos de limpieza, café y bebidas alcohólicas.
El aumento más bajo se dio en la lata de tomates en conserva (47,2%). Otros productos como la carne picada (46,9%), el arroz blanco (51,4%) y el tomate redondo (54,8%) aumentaron muy por debajo de la inflación.
Los cortes de carne en general, aumentaron casi 40 puntos menos que el nivel general de precios: el asado un 54,2%, mientras que la paleta aumentó un 56,8%; colita de cuadril un 57,5%, y la nalga un 57,1%.
Los datos corresponden al reciente informe del Centro RA de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, que dio a conocer su índice de “los más y los menos” de los últimos 12 meses en materia de inflación, correspondiente al mes de noviembre.
La crisis de la cebolla
A grandes trazos, puede decirse que la Argentina se autoabastece de cebollas. La producción está centrada en el sur de Buenos Aires, Santiago del Estero, Salta, Mendoza y San Juan. El grueso de la producción local se da entre febrero y agosto, por eso los precios suelen ser más bajos en la primera mitad del año. En primavera, en cambio, la merma productiva nacional hace que los precios suban y que los faltantes se cubran con cebolla importada.
Las zonas productoras recibieron lluvias en febrero, en el momento en que se iba a apilar; eso trajo problemas en la calidad y disminución del stock.
Además, se dio una crisis mundial en la oferta de cebolla. “Las producciones de cebolla fallaron en casi todo el mundo. Hay poca oferta y los precios son muy altos”, explicó Iván Potap, operador comercial del rubro. La sequía en muchos países proveedores como China, España, Nueva Zelanda y México; la desaparición de la oferta ucraniana por la guerra; el aumento de los costos de combustibles y fertilizantes, empujaron la caída productiva y la suba de precios.
Otro problema climático se generó en la segunda temporada de cosecha, por los fríos tardíos hasta noviembre y la sequía en la zona centro del país. El atraso de la producción fue de un mes y medio o dos.
De ahí que la importación de cebolla este año fue récord, proveniente de zonas de Brasil como Minas Gerais y Goias, que también tuvieron problemas climáticos y caídas productivas. Además, esas importaciones se pagan al dólar blue, otro factor de aumento.
Frutas y verduras lideran la inflación
El rubro de Frutas, dentro de la división Alimentos y Bebidas, exhibió el mayor aumento en el NEA en noviembre (+11,9%, con fuerte estacionalidad). En segundo lugar quedaron las Aguas Minerales, Jugos y Gaseosas (+8,4%). El podio se completa con Pan y Cereales (5,7%), siendo las tres únicas aperturas con subas superiores al nivel general regional. Por el contrario, la menor suba se registró en Carnes y Derivados (2,1%), mientras que Verduras, Tubérculos y Hortalizas no mostró variación (0%).
Pese a ello, a nivel interanual es justamente Verduras, Tubérculos y Legumbres la apertura que se consolida como la de mayor crecimiento en la comparación año/año (166,6%); seguida de Aceites, Grasas y Mantecas (133,2%), y Azúcar, Dulces, Chocolate, Golosinas, etc. (130,3%). Además, Pan y Cereales (110,9%) y Frutas (104,0%), se suman al lote de aperturas con subas interanuales por encima del 100%.

Mayor y menor suba por rubro
El rubro con mayor aumento fue Indumentaria y Calzado, con un 122,4% anual, es decir que la ropa subió en promedio 7% cada mes del último año. En cambio, el rubro con el menor aumento anual fue Comunicaciones (sector regulado), que creció un 65,3% respecto a noviembre de 2021 (consistente en un ritmo mensual del 4,6% promedio).
Por otra parte, en mayor nivel de detalle, el subrubro con mayor incremento fue Verduras, que se incrementó en un 152% respecto a 2021, mientras que la suba más baja fue en Transporte Público con un 53,3% anual.
Esto permite dar cuenta de una divergencia en el ritmo de los precios, con artículos por encima del 100% anual y otros en la órbita del 50% anual; lo cual dificulta la desinflación y supone un mayor grado de presión, especialmente en los productos regulados que ostentan un nivel de atraso superior. En este sentido, un eventual ajuste de los rubros regulados podría alimentar nuevamente la dinámica inflacionaria.