La mujer de 35 años y madre de siete hijos que fue víctima de una agresión y abuso sexual ratificó su denuncia en sede judicial, según fuentes del caso.
Tal como publicó PRIMERA EDICIÓN en exclusiva, el hecho y por el cual hay un detenido, fue perpetrado el jueves 26 de enero en Concepción de la Sierra.
En su declaración, la mujer ratificó ante el juez de Instrucción 4 de Apóstoles, Miguel Ángel Faría, su denuncia en sede policial, e incluso agregó detalles respecto a la noche en la que padeció el ataque sexual.
Además, complicó la situación del joven arrestado, ya que dijo que pese a que tenía el rostro semicubierto lo reconoció como su vecino, el mismo que días antes la amenazó tanto a ella como a su hija, confiaron las fuentes.
El caso tiene una circunstancia poco frecuente, y es que la víctima no denunció el abuso por temor a represalias. Recién lo hizo cuando un médico notó que tenía signos de haber sido sometida sexualmente.
Ese jueves a las 22 la mujer juntaba leña para la cena cerca de su casa, cuando la golpearon con un trozo de madera en la cabeza. Luego la arrastraron 50 metros hacia una zona de monte y la violaron. Mientras esto sucedía dijo que recuperó la conciencia, ya que quedó semi desvanecida por el garrotazo y pudo notar que conocía al atacante. Sin embargo no dijo nada.
Producto del ataque sufrió una severa hemorragia. Primero fue atendida en el hospital de Concepción de la Sierra, tras lo cual fue derivada a un centro asistencial de Apóstoles.
Un médico de ese nosocomio, más precisamente un obstetra, notó los signos de abuso y recién allí decidió contar lo que le sucedió. De inmediato, una comisión policial recuperó las prendas íntimas de la mujer en el primer lugar donde fue internada, justo cuando estaban por ser desechadas.
Esta prueba tiene mucho valor, teniendo en cuenta que las llevaba puestas al momento del abuso y podrían contener material genético del agresor.
Mientras esto sucedía, el acusado fue detenido en el mismo barrio donde se produjo el ataque.
Negó los cargos
Fuentes del caso indicaron que el sospechoso, un joven de 20 años, fue indagado por el mencionado magistrado, donde negó los cargos en su contra.
El juez Faria le notificó que quedará tras las rejas hasta que se resuelva su situación procesal. Respecto al silencio de la víctima, que de no ser por el obstetra no hubiera radicado la denuncia policial, se supo que fue porque el sospechoso, antes de perpetrar la agresión, la habría amenazado diciéndole “te voy a agarrar a vos y a tu hija (quien es menor de 17 años) y si no, las voy a agarrar a las dos”, según fuentes.
Vale agregar que fue clave la rápida intervención de la policía para allanar domicilios y buscar prendas de vestir tanto de la víctima como del victimario, como así también rescatar ropa interior de la mujer en el hospital de Concepción de la Sierra, donde por poco no la habían desechado.
El caso fue investigado en un principio por el juez subrogante Juan Manuel Monte.