En la Unidad Regional de Policía de Oberá, referentes y propietarios de locales dedicados a la actividad nocturna se reunieron para abordar y tratar problemáticas referidas al Código de Nocturnidad.
Fue el primer encuentro de otros que se realizarán más adelante, y el eje principal estuvo puesto en que todos los entes pertinentes trabajen en conjunto.
Los temas que se trataron estuvieron relacionados a problemáticas que frecuentemente suceden de noche: volumen del sonido de los locales, expendio de bebidas alcohólicas, controles durante las noches, denuncias por la supuesta presencia de adolescentes tanto dentro de los locales nocturnos como en las calles consumiendo alcohol; también actos de discriminación que pueden ocasionar disturbios, entre otras actitudes que alteran el orden social.
En este sentido, un reconocido empresario del rubro opinó que fue una reunión “muy positiva” y junto a otros propietarios de locales para eventos y boliches bailables, coincidieron en la desventaja ante fiestas clandestinas.
“La Municipalidad se comprometió por intermedio del área de turismo a publicar los lugares autorizados para fiestas todos los fines de semana” aclaró.
También surgió el planteo de incorporar baños para uso exclusivo de integrantes de la comunidad LGBTIQ+. La propuesta fue aceptada por algunos locales para implementarla.