Una prima del único imputado por el doble parricidio de Andresito dijo ayer que “nunca sintió tanto miedo como cuando se quedó sola con él tras enterarse de los crímenes”.
Fue en el marco de la tercera jornada del juicio oral y público que se le sigue a Alejandro Kirschner, acusado por el doble homicidio de sus padres, en el Tribunal Penal de Eldorado.
Para contextualizar la frase de la testigo se debe tener en cuenta que, el acusado, al primer lugar que acudió tras la muerte de sus progenitores fue a la vivienda de su prima. Fue alrededor de la 1 del domingo 22 de septiembre de 2019 en Comandante Andresito.
El marido de la mujer le pidió al sospechoso que se quede en la casa mientras él iba a avisar a la policía. Fue allí que ambos primos se quedaron solos.
Mientras tanto, los uniformados hallaban a las víctimas, Hilario Kirschner (61) y Mirta Sachser (54), sin vida en su domicilio. Les habían disparado dos veces a cada uno mientras hacían la cena y miraban televisión.
Comenzaba la investigación y Alejandro, el hijo del matrimonio, no tardó en aparecer como uno de los primeros sospechosos.
“Se mataron”
Según el relato de la testigo Marta Isabel Kirschner, eran cerca de las 0.30 o la 1 (del domingo 22 de septiembre de 2019) cuando su primo Alejandro llegó a la casa. Le dijo a ella y a su esposo (Alejandro Baier) que sus padres “se mataron”.
Aún sin entender nada ya que estaban acostados mirando una película cuando arribó el imputado le repreguntaron: “¿quiénes se mataron, estás seguro?”, a lo que Alejandro contestó “parece que los mataron”, respecto a sus padres, explicó la mujer. Esta respuesta le llamó la atención a la pareja, aunque por el shock del momento no le dieron relevancia.
Apenas se fue su marido, ya que dijo que iba a avisar a la policía de lo sucedido, ella quedó sola con su primo. “Nunca sentí tanto miedo como cuando me quedé sola con él”, afirmó la mujer. “Le hice curaciones en el dedo índice de su mano derecha y al consultarle qué sucedió mi primo me dijo que lo había mordido un perro”.
Este detalle no es menor, ya que las víctimas tenían seis canes, dos boxers, dos salchichas y dos criollos. Uno de los salchichas agonizó durante horas tras ser embestido por un vehículo que, según dijo el mismo imputado, lo atropelló cuando salió de la vivienda familiar, y que al regresar supuestamente halló los cuerpos de sus padres.
Respecto a qué hizo en ese horario en el que salió, un testigo le habría brindado ayer una coartada. Se trata de un amigo del sospechoso domiciliado en la zona, a quien habría ido a visitar ese sábado 21 de septiembre de 2019 a la noche.
“Marihuana fiada”
Leandro Silva, amigo del acusado, fue otro de los cinco testigos que declaró ayer. El joven afirmó que Alejandro Kirschner estuvo con él desde las 00 hasta las 00.30 de ese sábado para domingo 22 de septiembre de 2019. En ese horario y para los forenses y según figura en el expediente fue perpetrado el doble parricidio.
Es decir que para el acusado sería una coartada y que seguramente, será utilizada por su defensa a la hora de los alegatos.
El amigo del sospechoso relató que Alejandro estuvo con él y un tercero en su vivienda durante un rato, hasta que quedaron solos. En ese momento recordó que “fueron a comprar marihuana fiada porque no tenían dinero. Pero al no poder conseguirla Alejandro se marchó en su vehículo”.
La ronda testimonial de ayer se completó con el relato de un sobrino de las víctimas, Fabián Sachser. El hombre, quien es camionero, fue el último en dialogar con la pareja asesinada.
“Los llamé desde Cuatro Bocas. Hablamos entre las 20 y las 20.30 de muchas cosas, de la vida y de la yerba mate, pero no noté nada extraño”, recordó con tristeza. Los dos últimos testigos fueron otra sobrina del matrimonio, Estela Kirschner, quien fue citada porque figuraba su teléfono como uno de los que llamó también ese día sábado 21 y un policía que fue el primero en llegar a la escena, Franco Sayour.