El pasado 3 de marzo se celebró el Día Internacional de la Audición con el objetivo de llamar la atención sobre la importancia de la identificación temprana y la intervención para la pérdida auditiva. En este contexto, la fonoaudióloga Natalia Zajaczkowski habló con la FM 89.3 Santa María de las Misiones sobre la necesidad de “concientizar y promover los controles auditivos y también la inclusión, saber y comprender que los problemas auditivos no son algo poco frecuente y nos puede pasar a todos”.
Consultada por el uso de auriculares, pantallas, celulares y juguetes ruidosos, la experta sostuvo que hay que tener en cuenta que “la distancia del bracito de un niño al juguete es más corta que la nuestra, así que está más próximo al oído que para nosotros”.
“Los problemas de audición por ruido tienen dos parámetros para controlar, no solamente el nivel de intensidad, los decibeles o el volumen, sino que el tiempo de exposición. Esas dos cosas en conjunto son el parámetro a tener en cuenta al momento de elegir un juguete o de saber si está intenso o no ese sonido”, advirtió.
Y ejemplificó que “nuestra voz sin la máxima intensidad es más o menos 60 decibeles, mientras que entre 80 y 85 decibeles, en muchas horas de trabajo, ya pueden generar con el tiempo un problema de audición”.
En consecuencia, señaló que las audiometrías son controles necesarios para detectarlos de forma temprana. “Son estudios que no duelen nada, rápidos, cortos, sencillos pero hay que acercarse y hacerse el control para chequear cómo está tu oído en realidad, y no es una práctica común, en Misiones no es frecuente”, remarcó.
Ruidos molestos
La fonoaudióloga explicó: “Los problemas de audición por ruido específico son 100% prevenibles. Esto quiere decir que si yo ocupo pocas horas mi auricular, o si estoy en un ambiente laboral ruidoso y controlo la intensidad de sonido, uso protectores de audición -como en el caso de personas que están en una empresa, en construcciones o en ruidos más intensos durante muchas horas- son 100% prevenibles”.
No obstante, alertó que “una vez que empiezan los problemas, que puede ser en uno o en los oídos a la vez, son progresivos” e incluso “se puede llegar al uso de los audífonos”.