Hoy se cumplen 16 años desde que la provincia de Misiones se convirtió en pionera al colocar el primer implante coclear del NEA.Aquel 31 de marzo de 2007, especialistas le devolvieron la audición a Thamara Catania: una niña oriunda de Eldorado que, en ese entonces, tenía tres años de edad.
Tras 16 años de esa intervención, y ya hecha una joven de 19 años, Thamara dialogó con PRIMERA EDICIÓN y explicó lo que para ella significó recibir ese implante de pequeña, y cómo siguió su vida después de eso.
“Desde muy chiquita me diagnosticaron hipoacusia bilateral profunda y el implante coclear cambio mi vida. Ahora estoy cursando el sexto año del secundario y una de las actividades que más me gusta es ir al gimnasio”, comenzó diciendo.
Si bien hoy en día la joven vive junto a su familia en Esquina, Corrientes, explicó que vuelve siempre a Eldorado, donde tiene familiares y en donde recibió los primeros tratamientos de rehabilitación fonoaudiológica, psicopedagógica y psicológica, luego del implante que le fue colocado en uno de sus oídos.
Pese a que Thamara reconoció que recibe ayuda de sus padres Hernán y Alejandra; y de sus terapeutas para estudiar, ya que ciertas tareas vinculadas a la comunicación aún le cuestan, “gracias al implante, logré tener una vida normal. Hablo y leo mucho y hoy sigo adelante con mi vida”, señaló.
En ese punto, la joven aprovechó para dejar sentado su agradecimiento a los profesionales que intervinieron en la colocación de su implante y, en especial, a la fonoaudióloga Natalia Zajaczkowski.
“La selección de quienes reciben el implante cambió”
Tras el aniversario de ese evento histórico para la salud de la provincia, FM 89.3 Radio Santa María de las Misiones dialogó con la fonoaudióloga Natalia Zajaczkowski que, aparte de haber estado a cargo de aquella primera colocación en 2007, es presidenta del banco de audífonos de la provincia.
La especialista explicó que “los parámetros médicos y el protocolo para la selección del paciente que recibe el implante cambió desde que arranqué con el primero en el 2001, cuando vivía afuera del país”.
Mientras antes ponían implantes cocleares sólo a pacientes de determinada edad con una hipoacusia profunda en los dos oídos (es decir a los que no escuchan nada con ninguno), hace un tiempo se incorporó también a pacientes que presentan una pérdida progresiva de la audición y que los audífonos ya no le ayudan a escuchar. Además, se comenzó a incorporar también a aquellos pacientes que tenían una pérdida en un solo oído; es decir, “se evalúan un montón de parámetros para poder establecer un candidato a un implante coclear”, explicó.
En cuanto a los costos, la especialista indicó que, si bien los que se atienden por medio de Salud Pública no deben abonar nada, los que consiguen un implante por sus propios medios pagan un precio en dólares que se mantiene a través de los años. No obstante, explicó que cada vez hay más conciencia en la población que tiene obras sociales y prepagas, ya que cada vez son más los que exigen cobertura total de esta prestación; lo cual es algo obligatorio según lo establece la Ley 25.415 en el país.
Desde el primer implante se colocaron más de 130 en la provincia
En diálogo con este medio, la fonoaudióloga Natalia Zajaczkowski se refirió sobre cómo avanzó la provincia desde ese primer implante hace 16 años. “Hubo un antes y un después luego de ese implante coclear en la provincia. Eso vino a romper una barrera. En su momento se hacía todo en Buenos Aires. Las personas con hipoacusia no tenían tratamiento acá, no había acá la parte quirúrgica y era algo que se tenía por muy complejo; y aparte después, para el post implante, los pacientes tenían que trasladarse”, explicó.
Desde ese entonces, se colocaron otros 130 más. Sobre eso, la especialista hizo una salvedad: “hay que recordar que el implante coclear es un dispositivo, pero después hay otros tipos de implantes auditivos”.
Por otra parte, señaló que con el paso del tiempo y a partir de las facilidades que brinda el Programa Provincial de Detección Temprana de la Hipoacusia, muchos misioneros “prefieren operarse en la provincia para evitar el desarraigo y también por el post operatorio. Si te operás en Buenos Aires, por ejemplo, uno tendría que pasar allá eso”. Debido a ello, explicó que en la provincia “estamos bien preparados”, finalizó.