Siempre mantuvieron distancia. Y en la “Rosadita” misionera creen que se debía a la alta influencia que los molinos de Corrientes (como Las María o Cooperativa Liebig) o empresas como Molinos (que elaboran una amplia variedad de alimentos) tenían en el manejo de la relación con la Secretaría de Comercio Interior de la Nación, al momento de pujar por el valor del paquete de yerba mate en las góndolas.
Sin embargo, este año, la Nación modificó su estrategia de negociación con las alimenticias. En el caso de las yerbateras, PRIMERA EDICIÓN pudo saber que Matías Tombolini está convocando a cada firma de manera particular y ya no como cámara o por provincia.
Así, por el despacho del funcionario massista ya pasaron representantes de las dos poderosas yerbateras correntinas antes mencionadas. Pero, hasta ayer y a pesar de los contactos telefónicos, ninguna misionera sacó turno para enfrentar el convenio de precios cuidados, que le posibilite acceder luego al “dólar agro”, tras la resolución de la Secretaría de Agricultura que puso “stand by” al “oro verde” para obtener ese beneficio en las exportaciones.
Por todo ello, representantes de La Cachuera, Gerula, Rosamonte y la Cooperativa de Santo Pipó (Piporé) solicitaron una audiencia con el gobernador Oscar Herrera Ahuad. Lo hicieron por primera vez en los casi cuatro años de mandato y, en el encuentro previsto para hoy en la Casa de Gobierno, “romperán” el hielo de la relación que decidieron establecer con el mandatario misionero.
La audiencia se dará en un contexto en el que la molinería se “plantó” en no querer aumentar el precio de la hoja verde y la canchada; llevó la resolución 170 del INYM a la Justicia; y amenazó con pagos a 180 días a los productores, aunque este último hecho se modificó en la última semana a partir de la puesta en marcha del molino de Andresito (con capacidad de 500 mil kilos de acopio) y los 200 millones de pesos que la Provincia pondrá para que unas 25 pequeñas cooperativas compren la yerba de contado. Sin dudas, ambas significaron una competencia para los molinos en medio de una caída de stock de yerba que obliga a ceder ante los productores, dueños de la materia prima.
Posible agenda y posicionamientos
Mientras los empresarios nucleados en la Cámara de Molineros de la Zona Productora (CMZPYM) decidieron llamarse a silencio hasta después de la reunión, en el entorno de Herrera Ahuad explicaron a este Diario que la intención es escuchar a los integrantes de un eslabón de la cadena yerbatera.
“Si solicitan acompañamiento institucional de Herrera para negociar con la Nación el precio a salida de molino, van a encontrar apoyo siempre que lo expliciten y muestren la estructura de costos”, explicaron las fuentes.
“Así como la producción pidió por dos años consecutivos el apoyo al Gobernador para el laudo, se hicieron las gestiones y se consiguieron los mejores resultados ante el ministro Massa y el secretario Bahilo. En el caso de la industria, siempre que lo pidan, Herrera estaría dispuesto a gestionar los encuentros de cada uno de los empresarios con Tombolini pero siempre que se transparente la estructura de costos, que sea creíble para pedir un aumento de precio en góndola”, anticipó la misma fuente a PRIMERA EDICIÓN.
Sin embargo, aclararon que “no habrá cesión a modificar el precio del laudo, el pedido de pago contado a los productores y tampoco la modificación de postura por la vigencia de la resolución 170 que limita las plantaciones”.
Hasta el momento la Nación estaría otorgando entre un 12 y un 13% de incremento en los paquetes de yerba mate, cuando las empresas asumen el compromiso de abastecer el mercado interno sin más aumentos de precios.
“Antes los correntinos presionaban, en especial los que ofrecen más tipos de alimentos que la yerba y los empresarios misioneros aprovechaban esa presión para beneficiarse. Incluso, negociaban pagos a los productores por valores superiores a los fijados oficialmente, que lograban bajar en los laudos nacionales hasta los dos últimos que Misiones modificó esa estrategia y ‘blanqueó’ los precios y dejó a la industria sin esa estrategia. Hoy no hay ninguno que, con tal de conseguir yerba, pague $117 o $120 de forma anticipada”, explicaron las mismas fuentes.
En Apóstoles, Herrera Ahuad dijo el sábado que su interés es que todos los sectores -desde los tareferos hasta los industriales- consigan mejoras en los precios.
Hasta se lo escuchó mencionar: “No soy populista y quiero ayudarlos a todos los que me pidan intervenir. Como lo hizo la producción”.
Ahora, también la industria acudirá a la Rosadita para tratar de mejorar su rentabilidad.
“Necesitamos un 30% de aumento”
El presidente de la Cooperativa Yerbatera de Santo Pipó, Raúl Karaben, sostuvo que el valor de la yerba en góndola está atrasado y señaló que necesitan un aumento del 30% en el precio del paquete que sale del molino”.
El producto madre de Misiones está afuera, por el momento, del Programa de Incentivo Exportador, aunque se espera que sea incluído en las próximas resoluciones. Los empresarios para acceder al denominado “dólar agro” de $300 deberán incorporarse a “Precios Justos” que lleva adelante la Secretaría de Comercio Nacional para garantizar un tope a las posibles subas en el mercado interno
De acuerdo a la resolución 2023-466, la yerba mate (como el tabaco y la forestoindustria; entre otras economías) pueden aumentar un 3,2% por mes hasta agosto para poder exportar con una moneda diferencial.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, Karaben, titular de la firma que fabrica la yerba Piporé y una de las principales exportadoras del rubro en la provincia, evaluó que las condiciones que impuso el organismo que conduce, Matías Tombolini, colisiona con lo que pretenden los empresarios y vuelve impracticable la medida bajos esos parámetros.
“Con la situación económica actual, no hacemos nada con el 3,2%. Mínimamente necesitamos un 30% ahora y después iremos viendo con el correr de los meses”, afirmó.
Sin embargo, se mostró confiado en que el Gobierno nacional negociará el porcentaje publicado en el Boletín Oficial y autorizará subas por encima de ellos.
En esa línea, calificó como “muy necesario” el poder acceder al dólar a $300 para recuperar competitividad en el mercado externo.
“Estamos en un momento muy díficil para la industria yerbatera. Con el programa exportador resolveríamos algunos problemas, pero para eso necesitamos que se implemente ya en nuestro sector”, consideró.
“No sé que haremos”
Karaben sembró un manto de incertidumbre acerca de lo que puede ocurrir si la Nación se mantiene firme en su límite del 3,2%
“Sinceramente no se qué haremos en esa situación. Con un dólar a $300 tampoco nos cerrarían los números como para aumentar sólo un tres por ciento por mes, cuando la inflación tiene un piso del 7%”, cerró.