Hablemos hoy de los colores de nuestros ancestros, dicen que hasta 3 generaciones somos recordados, algunos hasta 4, a menos que nos volvamos alguien famoso o hayamos participado en algún hecho histórico, lo que quiere decir que nuestros nietos son las últimas personas que nos tendrán presente en su vida o en su memoria.
Así que pregunto: ¿Qué tanto sabes de tus ancestros? Somos ellos en mejores o peores versiones, según elijamos, somos ellos con todos sus colores, nuestro ADN es el suyo y estamos acá por ellos, incluso traemos sus conocimientos y sus aprendizajes.
Hay historias que se repiten de generación en generación, como si se activara un interruptor de algún hecho que tenemos que sanar o terminar de aprender para poder trascender. Y los colores también nos cuentan sus historias, de ahí que uno puede sentirse más conectado con un color más que con otro en determinados momentos de la vida. En lo personal, mis ancestros por parte de mi madre estaban muy conectados con el color verde y la naturaleza (chamana de una tribu guaraní), por parte de mi padre, el color violeta estuvo siempre presente, (inmigrantes: portuguesa y español) con los cambios de vida y desafíos que les tocó pasar, pero siempre avocados al servicio, a ayudar a otros.
Honremos a nuestros ancestros, ellos son nuestras historias, conociendo y recordando de dónde venimos seamos la mejor versión de los que estuvieron antes.
¿De qué color son tus ancestros? Una forma de saberlo es conociendo su historia y sintiendo desde lo más profundo de su corazón, porque esos colores también son los tuyos, esos colores también te darán información sobre quién sos, con sus características buenas y malas.
Historias difíciles, con toma de grandes decisiones, nos hablan del color rojo como también de valentía y miedos, ancestros creativos con grandes ideas y sueños, nos hablan del naranja; el amarillo relacionado a familias críticas, egocéntricos, de gran inteligencia y abocadas al saber, muy mentales.
Familias sanadoras son el verde y el rosa, como también llenas de resentimientos y envidias; el azul de familias tranquilas con el don de la comunicación y la mentira; las violetas son las que tuvieron que transformar su vida por completo, también sufren de apegarse mucho a las personas o cosas, pero tienen el don del servicio.
Es importante saber nuestra historia y de qué colores venimos.
¡Que tengas un hermoso domingo!