El juez Roque Martín González falleció ayer tras batallar por recuperar su estado de salud internado en una clínica del centro de esta capital.
Reconocido como uno de los camaristas penales de particular despliegue en debate, férreo de postura y conceptos, claro para evitar confusiones.
Nació en Corrientes pero se afincó en Misiones apenas se recibió de abogado. Se integró no solo a la vida judicial. Los vecinos del Tribunal Penal de calle San Martín casi 25 de Mayo lo conocían por pasar la mayor parte del día trabajando en la dependencia judicial y por sus recorridas de charlas e interacción constante.
Fue parte del TP-2 durante casi 30 años, junto a Alfredo Rafael Escribano y Juan Enrique Calvo, ya fallecidos, y presidió juicios con expedientes resonantes para la historia criminal de la provincia. Se retiró para iniciar sus trámites jubilatorios en el año 2018.
El año pasado fue recordado por los ministros del Superior Tribunal de Justicia en una ceremonia en el Palacio de Justicia.
Entre los últimos debates que contaron con su participación, se recuerda a menudo el que culminó con la condena a prisión perpetua a Jorge Alberto De Jesús por el femicidio a golpes de la comerciante panadera Ramona Mercedes Gauto (37) en un departamento en el microcentro de Posadas.
Anoche, los restos del camarista penal eran despedidos en una sala velatoria de Posadas para ser inhumados esta mañana.