Aprender a mirar las fortalezas propias es una forma de desarrollar el autoconocimiento, esto es muy importante para aumentar la confianza en el potencial que tienes y dejar la comparación a un lado que muchas veces es parte de la rutina de las personas sin darse cuenta, este hábito continuo puede ser cambiado antes de que torne negativo en las distintas áreas de la vida, por la simple razón que estás centrado en los demás, dejando de lado a las fortalezas innatas con las que naciste.
Compararte con otros te desanima manteniéndote estancado pensando que no estás listo para realizar tus proyectos, sintiéndote agotado al utilizar gran parte de energía en ver las habilidades de otras personas y no empoderar a las tuyas.
1- ¿Cómo puedes dejar de compararte con otros? La clave es enfocarte en tus fortalezas que seguro te luces en las cosas que amas hacer, si cada día optas por ver algo bueno en ti estás dirigiendo tu atención en tu potencial, y pronto dejarás de compararte con los demás.
2- Un cambio de paradigma, si te propones a pensar diferente, que tienes mucho para compartir con otros, desde la empatía hasta dar tus conocimientos que pueden ser de ayuda a personas que estén necesitando alguien como tú que los guíe y comprenda, esto aporta valor a tu autoestima cultivar pensamientos de contribución hacia otras personas y tu entorno.
3- Tienes que comprender que la comparación puede ser dañino para tu creatividad, causando frustración en tu vida. Es bueno saber que otras personas tienen un recorrido más amplio o de más años en su vida y profesión, entonces están más avanzados que tú, ser coherente ante esto te sirve en tu desarrollo personal haciéndote responsable que tienes un camino para recorrer y seguir con actitud de aprendizaje, si pones en práctica estas claves te ayudarán a mantenerte centrado en lo valioso que eres y observar tus fortalezas.