Lo primero que hizo ayer el presidente Alberto Fernández en su contacto con la prensa al inicio de su breve visita a Misiones fue afirmar que cumplió con el 90% del petitorio que le hizo Misiones cuando se impuso en las PASO de 2019.
Lo dijo en alusión a los cinco compromisos que había firmado en Rosario, cuando era precandidato, y se juntó con los representantes de las provincias que apoyaron su postulación, hace cuatro años.
Estando ayer en la tierra colorada aseguró que “solo le faltaba” cumplimentar con un último reclamo: la zona aduanera especial.
Sin embargo, sus afirmaciones no resistieron el archivo: según había publicado PRIMERA EDICIÓN en agosto de 2019, de los cinco pedidos el único que podría llegar a concretarse será el área especial impositiva que le permita a Misiones competir con Paraguay y Brasil, pero cuya concreción será más bien resultado de las arduas negociaciones y acuerdos entre Herrera Ahuad y el ministro de Economía y precandidato presidencial Sergio Massa, quien asumió el compromiso de venir en septiembre con ese fin.
Todavía está fresco en la memoria de los misioneros el “vetazo” de Alberto al AAE.
Sobre lo demás, no hubo ni siquiera avances: el primer pedido de Misiones tenía que ver con la reparación histórica de recursos financieros. En ese sentido, la tierra colorada jamás fue reconocida en su reclamo para aumentar un punto la coparticipación. Aunque se presentó la nota formal, tras los resultados del Censo que demostró el crecimiento demográfico, la coparticipación per cápita siguió perdiendo lugares y en 2023 aceleró su caída y se situó en un -2,1% real.
Respecto de la conclusión de la autovía de la ruta 14 que une Paso de los libres con San José, tampoco hubo avances. De hecho, ayer en la recorrida de parte de la obra pública que realiza Vialidad Nacional, solamente se recorrió el tramo de la autovía Posadas-San José y el nuevo puente sobre el arroyo Las Tunas.
La continuidad de la autovía de la ruta 12 hasta Puerto Iguazú también quedó en el tintero y ni hablar de la retomar la concreción del gasoducto de la Mesopotamia, una deuda que el mandatario había reconocido en 2020 tener con Misiones que no pudo resolver.