Por una patología coronaria que obliga al acusado a permanecer bajo observación en una clínica privada luego de tres intervenciones y aplicación de tres stents sanguíneos, se suspendió el inicio del juicio al exaduanero Alberto Germán Rosas (62), como presunto autor de la muerte de su cuñado, Roberto Andrés Ríos (58), durante la madrugada del 15 de septiembre de 2019 en el centro posadeño.
El debate debía iniciarse este lunes y culminar el 30 de agosto en el Tribunal Penal 2 de la Primera Circunscripción Judicial.
Rosas está encartado como presunto autor del delito de “homicidio simple”. Ante los camaristas Carlos Jorge Giménez, Gregorio Augusto Busse y César Antonio Yaya, debe enfrentar las audiendas por violar el artículo 79 del Código Penal Argentino, que prevé condenas de entre 8 y 25 años de prisión.
El ataque, que le costó la vida al referente ambientalista misionero, ocurrió sobre la calle Sarmiento casi Jujuy de Posadas frente a la vivienda de quien resultó víctima fatal y después de una supuesta discusión entre cuñados.
El exaduanero fue detenido y al ser indagado por el juez de Instrucción 3, Fernando Luis Verón, habría admitido la autoría del crimen, refiriendo que fue en legítima defensa.
Los abogados del acusado argumentaron que padecía problemas graves de salud, y tras un pedido formal de su defensa se le concedió la excarcelación. Esta medida fue apelada por la Fiscalía de Instrucción 3 y por la querella, en representación de la familia de Ríos.
La Cámara de Apelaciones en lo Penal y de Menores declaró la nulidad del beneficio al considerar que la medida no había sido correctamente fundamentada, por lo que la defensa interpuso otro recurso.
Finalmente fue el Superior Tribunal de Justicia (STJ) por unanimidad el que declaró inadmisible la casación interpuesta y el exaduanero volvió a ser detenido. Esta vez, por orden del juez subrogante en la causa, Ricardo Walter Balor. Entre los fundamentos se destacó la gravedad del delito que genera una presunción latente de fuga o entorpecimiento de la investigación.
Poco tiempo después, Rosas volvió a su vivienda de calle Entre Ríos casi 25 de Mayo, donde le fijaron la detención domiciliaria bajo la responsabilidad de su esposa y hermana de la víctima fatal.
El ataque a Ríos, según la elevación de la causa fue efectuado por Rosas, con quien había salido esa noche. A las 4, testigos oyeron gritos presuntos de una discusión y pelea. Un vecino que regresaba a su hogar halló a Ríos en la calle boca abajo y suplicando ayuda.
A los pocos minutos y pocas cuadras de allí, sobre calle Entre Ríos casi San Luis, el supuesto agresor fue detenido a bordo de una camioneta blanca, Renault Oroch, cuando intentaba escapar hacia su domicilio.