Un grupo de vecinos pertenecientes al barrio Nuevo de Oberá se concentró en la CELO para exigir conectarse al servicio eléctrico de manera regular y evitar incidentes por conexiones clandestinas, tal como ya sucedió en otras oportunidades. En la cooperativa, se reunieron con autoridades, pero no lograron soluciones concretas.
Entre los presentes, el vicepresidente de la Comisión Vecinal, Gabriel Matías, contó que “es algo que venimos pidiendo hace más de cinco años a la Cooperativa Eléctrica de Oberá, que nos brinde el servicio de la luz”. Aseguró que “no es algo que pedimos gratis. Hoy, en esta reunión, desde la CELO, no hay ninguna respuesta, dicen que no tienen fondos, a pesar de que cobran una barbaridad la luz”.
Sucede que en este barrio ya se registraron incidentes por las conexiones irregulares: “El señor que pasaba la luz para más de 20 vecinos, explotó la térmica y prendió fuego”, relató el vecino. Después de esto, “ahora le cortaron la luz a mucha gente. Aparte de eso, otros vecinos que pasaban la luz también están cortando por miedo a las multas”.
Por este motivo, Matías señaló que “venimos hasta la CELO para llegar a un acuerdo y tener una solución”. Sobre el barrio, comentó que “los afectados son más de 50 familias y quienes necesitan el servicio son más de 150, aunque algunas ya consiguieron”. Para las conexiones barriales, indicó que “contamos con la autorización de la Municipalidad, la certificación de la RENABAP (Registro Nacional de Barrios Populares”.
En materia de inversión para esta obra, el vicepresidente de la Comisión Vecinal relató que actualmente “es una obra que costaría unos 40 millones de pesos”.