La ecosanación, una corriente y metodología terapéutica que conforman la genética, la dinámica de los ecosistemas y la neuropsicología, nos da oportunidad a descubrir los procesos que la naturaleza brinda para sanar y equilibrar nuestros campos morfogenéticos.
Cuando comenzamos a transitar el mundo natural y transferimos naturaleza en nuestro modo de vivir es fácil darnos cuenta que muchas de las cosas que hacemos conducen a la ecosanación.
Así como ocurre en la naturaleza, ocurre en nosotros. Los seres humanos hemos ido generando relaciones entre nosotros y con la naturaleza, desde una grupalidad definiendo lo importante, lo urgente, lo vital y lo efímero.
Otorgamos valores circulares ascendentes y descendentes al ilimitado mundo que percibimos y desde allí podemos iniciar un camino de ida con varias estaciones de descanso, aceleración y también moderación. Ritmos que la naturaleza imprime con muestras palpables cosas sensitivas.
Esa práctica perpetua, sensual y discreta que brinda alimento, refugio y oportunidad de encuentro, con nosotros mismos primero, para conformar identidad y descubrirnos. Ser, implica vernos y requiere valor (y muchas veces indicaciones porque venimos de generaciones de silencio). Para eso está la naturaleza de nuestra psiquis (alma) y la otra, que en realidad es lo mismo, la que habitamos y tantas veces sin necesidad modificamos.
Morningglory
Empezar es fundamental, luego sostener es un desafío, llegar es determinado por la sabiduría del momento y las condiciones.
En homeopatía floral existe una especie vegetal que acompaña los procesos para tener un despertar glorioso, y uno podría creer que eso debe ocurrir a la mañana, justo después de dormir algunas horas, pero eso está vinculado a los procesos del descanso y restauración física.
Morningglory (Hipomeapurpurea (L.) Roth) o conocida como despertar glorioso influye sobre los síntomas de desequilibrio en general, ritmos de vida desregulados, excesos, incapacidad de tomar la energía del cuerpo etérico, mientras que en sus aspectos armonizadores propicia la fuerza vital de los ritmos saludables y regulares. Alineación con la naturaleza y las necesidades de los organismos diurnos que requieren de la noche para restaurar las funciones celulares y sistémicas para sostener la vida desde el sistema.
Mgter. Anahí Fleck
Maestrando en Neuropsicología. 0376-154-385152