Alan Aranda (25) fue encontrado sin vida ayer en Montecarlo tras un día de búsqueda. Investigan si murió tras recibir una descarga eléctrica, ahogado o por otra causa.
Un hombre de 59 años es el único detenido e investigado por “homicidio culposo”, por el juez de Instrucción de Puerto Rico, Leonardo Manuel Balanda Gómez. Se trata del dueño de una propiedad cercana al arroyo en el que apareció el joven buscado y que vivía en situación de calle con su hermano de 23 años.
El domingo la víctima fue a una chacra cerca del arroyo Bonito, en inmediaciones de la avenida Libertador al 1000 de Montecarlo, supuestamente con intención de cosechar bananas para su alimentación.
Su hermano, le dijo a la policía que antes de que llegara la noche de ese día, se retiró del lugar porque mantuvo una discusión con Alan.
Como al día siguiente no regresó a la zona urbana que frecuentaban, fue a buscarlo y lo halló cerca de la orilla del arroyo, tendido, boca arriba y sin signos vitales. Acudió a pedir ayuda a una delegación municipal y volvió con la policía pero el cuerpo ya no estaba.
El lunes se realizó un rastrillaje en la zona e incluso en la vivienda del ahora detenido. Los policías registraron que la propiedad tenía un cerco eléctrico de seguridad.
Ayer a primera hora, la búsqueda se reinició en el arroyo y los efectivos de la Unidad Regional XV hallaron el cadáver. El juez ordenó que el cuerpo se traslade a la Morgue Judicial de Posadas para la autopsia que intente establecer cómo murió el joven.