Mira los ojos de un niño, observa su mirada cómo realmente ve, enfoca y vive ese momento conscientemente, cómo está únicamente en el presente, AQUÍ Y AHORA.
El problema viene cuando perdemos ese enfoque y vamos deambulando por la vida de una manera automática, hacemos millones de cosas y no prestamos atención a nada, nuestros días son ajetreados y erróneamente creemos que ese ritmo nos conduce a algo superior porque mantenemos ocupadas todas las horas del día y lo que en realidad estamos haciendo es alejarnos cada vez más de nosotros mismos.
Nuestra parte más racional entiende que este proceso es totalmente normal, que la vida es así, que cuando uno es adulto tiene responsabilidades y ocupa el tiempo en millones de actividades. Es una forma de vivir hacia fuera, guiados por la corriente hacemos lo que se supone que debemos de hacer y lo que está normalizado por la sociedad en que vivimos.
Pero, de todas esas acciones que llevamos a cabo, ¿cuántas realmente las hacemos escuchando nuestro interior? Y ¿cuántas las hacemos porque nos sentimos casi obligados?
Está prácticamente establecido socialmente que la forma de aprovechar la vida y vivir con plenitud es precisamente esa, habernos mantenido ocupados y ser reconocidos por haber obtenido muchos logros en su mayoría materiales y no nos paramos a reflexionar sobre lo que nosotros sentimos acerca de ello.
Tu vida empieza y acaba en ti. Parece una afirmación muy simple y muy sencilla, pero creo que nos empezamos a olvidar de ello a medida que vamos creciendo. No tiene nada que ver con un sentimiento egoísta, de que yo soy el único importante y de no pensar en nadie más. Sino más bien todo lo contrario, todos y cada uno de nosotros formamos parte de la totalidad de las cosas, del TODO y por eso es tan importante que vivamos lo que realmente sentimos y únicamente de esa manera, tendremos una vida satisfactoria para cada uno y estaremos en disposición de ayudar a todas las personas que tenemos alrededor.
Cuando vives fuera de ti, no te estás dando lo que necesitas, entonces, ¿cómo vas a poder dar algo a los demás?
Recuerda que nuestro paso por la vida consiste en realizar una serie de aprendizajes e ir evolucionando interiormente. Cuando estamos conectados con nuestro interior es muy fácil ver esta realidad, pero cuando vivimos centrados en todo lo que está en el exterior, nosotros mismos creamos una imagen distorsionada de lo que realmente es la vida y nuestro entendimiento se ve tan limitado que actuamos desde una perspectiva de escasez.
El universo tiene abundancia infinita para nosotros en todos los aspectos, pero para conseguirlo y ser una persona abundante en todo, necesitas mirar hacia dentro y descubrir quién en verdad eres.
Feliz y Bendecida vida.💖
Karina Holoveski
Mujer Medicina-Chamana.
Whatsapp: 3765-110223