Cada 11 de octubre se celebra el Día Internacional contra el Fracking, con el objetivo de crear conciencia en la población mundial sobre los graves daños ambientales y sociales que produce esta práctica para el planeta.
El fracking, también conocido como fractura hidráulica, es la forma que se viene llevando a cabo en los Estados Unidos y otros países para extraer del subsuelo recursos como petróleo y gas de una manera no convencional.
Esta técnica se realiza inyectando agua con arena y algunos productos químicos. Para ello es necesario ejercer una gran cantidad de presión y de esta forma extraer dichos recursos, lo cual provoca fracturas y daños de gran magnitud en las distintas capas de los suelos.
Consecuencias ambientales y sociales del fracking
- Produce altos niveles de contaminación de las aguas, tanto las superficiales como las que están ubicadas de forma subterránea.
- Durante el proceso de fracturación de los suelos, es necesario el uso de grandes cantidades de agua dulce, que son necesarias para el consumo humano.
- Resulta una práctica altamente peligrosa, que empeora el cambio climático, debido a las altas emisiones de gas metano.
- Pone en riesgo la producción agrícola y la ganadería.
- Provoca alteraciones en la manera de vivir de las personas que habitan estas zonas, quienes al final, se ven obligados a desplazarse a otros lugares que le garanticen mayor seguridad económica y social.
Fuente: Día Internacional de