Chancla, chancleta, ojotas, como quiera que sean conocidas, pueden causar serias lesiones al ser utilizadas como elemento de castigo y no como lo que son, un calzado. Un hombre de 41 años fue condenado en Santa Fe por agredir a su hijo con una ojota, causándole lesiones en la espalda y las piernas. La sentencia fue dictada por el juez Pablo Spekuljak, quien impuso una pena de un año y ocho meses de prisión efectiva tras un juicio abreviado.
Sucedió que, para llegar a semejante condena, a este agresor se le unificó esta denuncia con una pena anterior que el agresor ya había recibido por lesiones graves.
El incidente tuvo lugar en septiembre, cuando el niño y su hermano pasaron el fin de semana con su padre. La madre del menor notó marcas en su cuerpo después de bañarlo y, al interrogarlo sobre su origen, el niño confesó que su padre lo había golpeado con una ojota tras una pelea con su hermano. Este testimonio fue corroborado por el otro niño presente.
Ante la gravedad de la situación, la madre decidió presentar una denuncia formal. Como resultado de este proceso legal, el hombre fue condenado por el delito de lesiones leves dolosas calificadas, según confirmaron fuentes del medio El Litoral.
Fuente: Noticias Argentinas