Luego de 13 años Justicia Federal decidió reactivar la investigación sobre el paradero de la diseñadora porteña María Cash, quien fue vista por última vez en la provincia de Salta en 2011. Para avanzar en la reconstrucción de su itinerario, el fiscal general Eduardo Villalba ha citado a testigos clave que podrían aportar nuevos detalles sobre el recorrido de la joven, captada por cámaras de seguridad en la zona de Palomitas, a unos 50 kilómetros de la capital salteña.
Entre los citados se encuentra Ramón Crespín, dueño de una gomería local y uno de los primeros interrogados en la búsqueda inicial de Cash. Crespín ha sostenido que ni él ni su familia vieron a la joven tras su desaparición, y cuestionó la declaración de un camionero que afirmó haber dejado a Cash cerca de su propiedad.
Según el testimonio de Crespín, el camionero podría poseer información relevante sobre el destino de la joven, quien tenía 29 años cuando fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 en las cercanías del santuario de la Difunta Correa, sobre la ruta 9/34.
La Justicia Federal tomó el caso al considerar la posibilidad de que su desaparición pudiera estar relacionada con el delito de trata de personas, una hipótesis que ha cobrado mayor relevancia a la luz de casos recientes, como el del niño correntino Loan Peña.
La desaparición de Cash, quien fue buscada incansablemente por su padre, Federico, hasta su trágica muerte en un accidente de tráfico en 2014, se ha convertido en uno de los misterios más complejos de los últimos años en el país. Fue en enero de este año cuando el Ministerio de Seguridad de la Nación elevó a $5 millones de pesos la recompensa para quien aporte datos fehacientes sobre Cash.