Durante las últimas horas del domingo, la Policía de Villa Bonita acudió a pedidos de asistencia de algunos vecinos de Oberá con problemas de salud. El primer de los llamados fue por el caso de un niño de tres años que llegó junto a su padre hasta la comisaría con un malestar estomacal y fiebre alta.
Tras constatar el estado en que se encontraba, los agentes trasladaron al niño hasta el Hospital de Oberá donde fue examinado por el pediatra de turno y estabilizado para su posterior alta.
Horas después, los policías fueron requeridos en el barrio 11 de Noviembre de Oberá donde un hombre alertó que su madre, una mujer de 50 años, presentó fuertes dolores en el pecho y dificultades para respirar.
En el lugar, brindaron los primeros auxilios y contención mientras fue llevada hasta el nosocomio local, donde permanece internada en observación mientras realizan estudios médicos.