Una joven de 18 años fue detenida luego de que su hijo de tres años ingresara a la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del hospital de pediatría Fernando Barreyro de Posadas, presentando graves lesiones en los genitales y en distintas partes del cuerpo, indicaron las fuentes.
El caso, tal como publicó ayer en exclusiva PRIMERA EDICIÓN, se inició el pasado viernes 8 de noviembre a la madrugada, cuando la implicada se presentó en un CAPS de Azara con el pequeño lesionado, de allí lo trasladaron a un nosocomio de Apóstoles y finalmente fue derivada al citado hospital central para una atención de mayor complejidad.
Según trascendió, la mujer le habría referido a los médicos que su hijo fue atacado por un perro. Sin embargo, esta versión se desmoronó cuando al examen minucioso, los facultativos descubrieron que las heridas no serían compatibles con las mordeduras de un animal. Debido a la obligación que tienen los trabajadores de la salud de denunciar hechos donde puede existir violencia familiar, notificaron de inmediato sus sospechas a las autoridades, agregó la fuente.
De esta manera, el pasado jueves a la tarde los uniformados procedieron a detener en averiguación del hecho a la joven, quien en esos momentos estaba junto a la víctima en el hospital. En ese sentido, para continuar acompañando al menor durante su internación el juez de la causa, Miguel Ángel Faria (titular del Instrucción 4 de Apóstoles), orientó a los efectivos para que busquen y trasladen a la abuela materna del pequeño, de 43 años, al citado nosocomio, para que se quede al cuidado de su nieto mientras éste se recupera en la UTI de Pediatría.
Varillazos
Según el informe oficial de los médicos que atendieron a la víctima sufrió “lesión contuso cortante en los genitales de 1,5 centímetros aproximadamente, trauma y contusión en región frontal, trauma periorbital, laceraciones y contusiones”.
En base a las heridas se cree que las mismas serían compatibles con varillazos, confió un vocero. En las próximas horas la Justicia ordenaría el allanamiento en la vivienda de la joven, quien al parecer residía sola junto a su hijo.
El objetivo de los peritos será hallar el objeto con el que el niño podría haber sido agredido, entre otros elementos de interés para la investigación. Respecto a la detenida, se supo que ese mismo jueves fue alojada en la Comisaría de la Mujer de la Unidad Regional VII (con asiento en Apóstoles), y se informó que el juez la imputó en forma provisoria por el delito de “lesiones graves calificadas por el vínculo”. Por otra parte, fuentes vinculadas a la investigación dejaron entrever que tampoco se descarta que pudo ser otra persona la que agredió al menor y que la joven podría estar encubriendo y por motivos que aún se desconocen.