El robo de ganado es una problemática que persiste y se agrava en la provincia de Misiones. Según Matías Pamberger, presidente de la Sociedad Rural de Misiones, los casos de abigeato no sólo continúan sino que podrían incrementarse hacia fin de año debido a la demanda de carne para las festividades.
“Sigue habiendo robo de ganado y va a aumentar de acá a fin de año por las fiestas, lamentablemente”, afirmó. Sin embargo, la situación se complica aún más por la falta de recursos y la limitada respuesta de las autoridades policiales, quienes aseguran no contar con medios suficientes para enfrentar esta problemática.
Falta de recursos
Pamberger aseguró que la situación en las zonas rurales del sur de la provincia es delicada, con robos de entre cuatro y cinco cabezas de ganado a la semana, aunque en la región norte los números son aún más alarmantes. “En el sur de la provincia anda por las 4 a 5 cabezas y en el norte hay más casos, ahí está más complicado”, expresó el dirigente.
Según relató, uno de los principales obstáculos para enfrentar el abigeato es la ausencia de denuncias formales, ya que las comisarías solo aceptan exposiciones y no registran denuncias oficiales de los productores. “En las comisarías no hay registros, porque no toman denuncias. Ellos solamente hacen exposiciones, entonces, para ellos, no hay robos”, señaló Pamberger.
Ante esta situación, la Sociedad Rural de Misiones ha comenzado a instar a los productores a exigir que se formalicen las denuncias para contar con registros más fiables y ejercer presión sobre las autoridades.
“Ahora les estamos diciendo a los productores que hagan la denuncia, que no tengan miedo y que le peleen a la policía para que le tomen la denuncia. Eso de las exposiciones no nos sirve, por eso no tenemos los registros como para eso”, explicó el presidente de la Sociedad Rural. Robos en distintas zonas
El aumento de casos en el norte de la provincia es evidente para Pamberger, quien detalló la frecuencia y el volumen del robo de ganado en diferentes localidades. En áreas como Profundidad, Fachinal y Candelaria, los productores reportan robos constantes y sienten que la inseguridad está lejos de ser controlada.
“Acá en el sur sé que se faenan unas 4 o 5 cabezas por semana, tal vez sea un poco más, pero la gente no cuenta. En la zona norte es mucho más. Vemos que hay semanas de ocho, nueve cabezas por semana. Ahí es más fuerte el robo de hacienda”, lamentó Pamberger.
Esta situación lleva a que los productores se encuentren en un estado de alerta permanente, lo que genera un ambiente tenso y peligroso en el que muchos han optado por armarse y permanecer en sus propiedades para proteger sus bienes. “Los productores tratan de quedarse más en la chacra, no salen, andan armados. Se sabe que no se puede delegar (la seguridad) a la policía, porque no tiene recursos”, manifestó.
Pamberger fue contundente y radical en su postura, ante una situación que considera que no tiene una solución inmediata.
“Para mi, lo ideal, es poner los carteles que dicen ‘Prohibido pasar’ y a la primera persona que entra sin autorización, plomo y a la bolsa, así nomás tiene que ser”.
El productor ganadero aseguró que hay mucha cacería ilegal, que entran a las chacras sin autorización.
“Hay mucha gente que sale a cazar sin autorización o entran a los campos sin autorización, por eso estaba muy bueno lo que se quería hacer con el tema de la cacería de los ciervos Axis, con gente que realmente entre en un registro de cazadores”, reflexionó.
Al respecto, afirmó que se trataría de una oportunidad interesante para reforzar la seguridad y acompañar a las fuerzas que no dan abasto en su trabajo en las fincas. “Además, eso serviría como una suerte de policía dentro del campo, eso sería mucho más efectivo que la policía, por lo menos en la zona sur, donde hay muchos ciervos Axxis”, aseguró.
Destino de lo robado
En cuanto a los responsables de estos robos, Pamberger sostuvo que suelen ser personas de localidades cercanas que roban ganado para su propio consumo o para venderlo de manera ilegal.
“Generalmente son gente de los pueblos cercano a las chacras, gente que está ‘mangueando’. Ahí la carne la roban y la venden de forma clandestina o la llevan a vender a Candelaria, Garupá. Muchas veces faenan y roban un cuarto nomás, no llevan el animal entero y ya sabemos que, en esos casos, roban para consumo personal. Ahora, cuando limpian el animal completo, sabemos que esos van a parar a lugares clandestinos de venta”, indicó.
Impotencia
En uno de los casos de robo de ganado en San José, el productor afectado logró identificar el lugar donde se encontraba la carne robada, pero no obtuvo una respuesta rápida ni eficiente por parte de las autoridades.
“Al productor de San José, que le robaron tres terneros, primero le habían carneado un toro. Entonces él fue y dijo donde estaba la carne, todo. Encontraron la carne que ya estaba en estado de descomposición. Así después la venden, no tienen problemas, la lavan con lavandina y así la venden”, relató Pamberger.
Para el presidente de la Sociedad Rural de Misiones, la respuesta judicial es insuficiente y muchas veces deja a los productores en situaciones de frustración.
“Como pasó en San José, el tipo lo llevó, lo metieron preso por dos días y ya estuvo afuera. Y se le reía al productor que fue su víctima, se pasaba frente a la casa y se reía. Eso te da una impotencia y decí que el chacrero era medio tranquilo, porque si no, sacaba una arma y le metía un tiro”, expresó Pamberger.
Faltan políticas de seguridad
Desde la Sociedad Rural de Misiones han propuesto medidas que podrían mejorar la situación, como la creación de mataderos municipales que ofrezcan un día específico para la faena de animales, lo que permitiría un mayor control sobre la carne que se comercializa en la provincia.
“Yo había presentado una propuesta para que se haga un matadero en cada municipio, habilitado y que se ponga un día de faena. Va a costar hasta que todos se organicen y se den cuenta que es lo mejor. Con eso uno puede saber quién tiene carne legal y quién no. Ahí vas a cortar mucho con el robo”, expuso.
Además, Pamberger enfatizó que los municipios deberían contar con servicios de bromatología y aumentar la regulación sobre los comercios que venden carne para asegurar su procedencia.
“En varios foros de seguridad que hemos hecho, les hemos pedido a los municipios para que cuenten con servicios de bromatología o que le apuren a los negocios, para saber de dónde sacan la carne, a dónde la compraron, todas esas cosas”, explicó.