Un efectivo de la Policía de Misiones fue detenido el viernes poco antes del mediodía y tras varios días de seguimiento e investigación de la Dirección Cibercrimen de la fuerza provincial. La aprehensión fue ordenada por el juez de Instrucción 1 de la Primera Circunscripción Judicial, Marcelo Cardozo y recayó sobre un comisario mayor de 53 años y dilatada trayectoria en la Dirección Bomberos.
De acuerdo a fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, el arresto se concretó tras las denuncias de estafas cometidas con tarjetas de crédito clonadas o truchas a varios comercios de esta capital. Una cadena de supermercados sería la principal damnificada.
Las sospechas en las estafas incluyen a un hijo del comisario que es agente de policía y que fue demorado como posible partícipe directo de las compras de mercadería (mayormente vino y carne de novillo) fraudulenta por al menos 2,5 millones de pesos. Pero también al sospechoso se lo vincula con la tenencia, compra y reducción de armas de fuego y municiones.
Las mismas voces señalaron que el operativo de aprehensión se concretó sin resistencia y fueron secuestrados celulares y dispositivos informáticos, un automóvil propiedad del comisario, entre otros elementos, para ampliar la pesquisa que encabeza el magistrado de turno en diciembre.
El sospechoso fue trasladado luego a la celda especial para integrantes de fuerzas de seguridad en el anexo del Servicio Penitenciario Provincial en el predio de la comisaría Segunda de la Unidad Regional I, de la avenida Tambor de Tacuarí y Rocamora.
Los primeros datos que trascendieron señalan que el integrante de la Dirección Bomberos y su hijo agente de la Unidad Regional I habrían protagonizado una serie de estafas con tarjetas de crédito que dejaron varios millones de pesos de pérdidas.
Los cruces de datos y el rastrillaje que realizó la Dirección Cibercrimen fueron informados el jueves al juez Cardozo y este ordenó el procedimiento de detención.
Ayer, antes que la información sobre la investigación tomara trascendencia, desde la Jefatura de Policía y tras el papeleo correspondiente de la Dirección Asuntos Internos, se anunció que el comisario mayor nacido en San Javier fue apartado de sus funciones y cargo en la fuerza provincial para que la Justicia cumpla con su labor de investigarlo.
“Innovador”
Voces de autoridades dentro de la institución del Estado, agregaron que el comisario mayor tiene una amplia labor en la Dirección Bomberos. Uno de sus últimos destinos, fue la dependencia respectiva en la comisaría de Santa Ana.
Pero se señaló que durante varias gestiones encabezó la dirección y tomó notoriedad con iniciativas que habrían terminado en la nada o con mínimos avances.
Uno de sus proyectos habría necesitado el uso de fondos que dispuso la Dirección General de Administración de la Policía para comprar una motocicleta y adaptarla para cumplir la labor de “motobomba”, para combatir siniestros con fuego.
“Pero eso nunca funcionó, solo marketing y ningún resultado”, concluyó un experto entre los bomberos provinciales y camarada del ahora detenido.
Otra voz policial incuestionable como fuente, señaló que tampoco se aclaró cuánto se gastó y si “la gran idea” solo fue pergeñada para obtener la “financiación”.
Mañana el comisario y su hijo serán llevados al juzgado (avenida López Torres casi Mitre) para ser indagados bajo la imputación provisoria de “estafas”.