Al igual de Misiones, la vecina provincia de Corrientes enfrenta un inicio de año marcado por incendios en un contexto de “Niña moderada”, con temperaturas varios grados por encima de lo normal y lluvias ausentes. Desde el Gobierno provincial se prohibió terminantemente iniciar cualquier tipo de fuego, en tanto que el índice de peligro de incendios permanece en niveles “muy alto” y “extremo”.
Eulogio Márquez, director de Defensa Civil, destacó el esfuerzo de bomberos y brigadistas que han trabajado en múltiples focos. “Desde fines del año pasado hemos tenido incendios de distintas magnitudes. Uno importante ocurrió en el paraje San Borjita, que comenzó en la banquina, avanzó hacia pastizales y alcanzó una forestación, consumiendo grandes áreas hasta el 1 de enero”, explicó.
El panorama de la segunda semana de enero incluyó focos activos en 11 localidades, como Sauce, donde el fuego arrasó con 1.500 hectáreas, y El Sombrero, donde brigadistas trabajaron 24 horas continuas para sofocar las llamas. Márquez señaló que “en esta temporada estival, los incendios tienden a surgir durante la siesta, cuando las temperaturas alcanzan su pico”.
El 2024 trajo una mejora en la logística, con más equipamiento y vehículos aportados por el Gobierno provincial. Sin embargo, Márquez insistió en la prevención y el aviso temprano como claves para evitar mayores daños. “No prendan fuego y, si ven humo, avisen de inmediato al 100, 103, 105 o 911, o a través de la app ‘Alerta Corrientes'”, enfatizó.
Asimismo, ya se han realizado dos denuncias judiciales por presuntos incendios intencionales en Ituzaingó y Curuzú Cuatiá, demostrando un enfoque más firme en la lucha contra el fuego. La prohibición vigente busca evitar nuevos episodios en un contexto climático adverso.