Trabajadores del Centro de Atención Primaria de Salud (CAPS) “Los Lapachos”, ubicado en el kilómetro 4 de la ciudad de Eldorado, viven días de incertidumbre y temor teniendo en cuenta que en menos de diez días sufrieron dos robos, donde se llevaron todos los elementos básicos de atención.
El lugar cuenta con un vacunatorio, una parte de enfermería, policonsultorios y un SUM donde se brindan cursos y capacitaciones, pero de a poco, el CAPS que era una referencia, se ve de a poco abandonado, debido a los robos y sin ningún culpable.
“Nuestros CAPS cuenta con un médico pediatra, médico clínico, un cirujano, un oftalmólogo, un odontólogo, una ginecóloga, una obstetra y tenemos una farmacia bien completa, y esto funcionaba gracias a nuestro equipo informático que tenía antena, wifi hasta que nos robaron todo” , lamentó la enfermera Claudia Ibarra en diálogo con la radio de Norte Misionero.
El robo lo descubrieron este jueves pero no saben con certezas si ocurrió en las últimas horas o hace tres días atrás. Apenas pasaron diez días del último robo (entre el 29 y 30 de diciembre) y ya fueron víctimas de los amigos de lo ajeno nuevamente que, de a poco, van desvalijando al CAPS.
Entre los dos delitos contra la propiedad de los últimos días y uno del mismo tipo que ocurrió en mayo pasado, “robaron todo lo que sea luces, ventiladores de techo, inodoros, bachas, hojas de ventana, rejas, dos computadoras (una del tipo todo en uno y otra con su CPU), un estetoscopio, fetoscopio, medicamentos, un termómetro digital, un saturómetro de oxígeno en sangre y un montón de elementos básicos que usamos en la atención de los niños y los pacientes que vienen a este CAPS”, resaltó Claudia.
“Y si siguen llevando no sé qué nos va a quedar, como está este lugar tan lindo, ya no funciona”, lamentó y apuntó a la saña de los malvivientes porque lo que no se roban, lo destrozan.
La reja, que debería oficiar de seguridad, sin embargo no los detiene. “Hoy la reja no la pudieron llevar porque la encontró la policía en el yuyal”, sumó.
Sin embargo, a pesar de todo, la atención es imprescindible, por eso “seguimos trabajando normalmente, nuestros profesionales trajeron sus propios elementos para tratar de dar una respuesta a los pacientes”, comentó la trabajadora de salud pública.
Ibarra lamentó que los vecinos de los más de 15 barrios que allí se atienden, ahora deberán trasladarse a otro centro de atención en el kilómetro 3 o kilómetro 11.
Robos reiterados y amenazas
La enfermera Claudia sospecha que el ladrón o los ladrones son los mismos que cometieron el delito en el mismo lugar el 28 de mayo y entre el 29 y 30 de diciembre.
En una de esas incursiones delictivas, los ladrones dejaron una amenaza escrita -con errores ortográficos- apuntando contra un personal de salud, pero no saben para quién en concreto: ‘Esto no fue un robo, esto fue un (ininteligible), para la petiza del CAPS’, decía la amenaza.
Por el momento, tras la denuncia policial, no se pudieron recuperar los elementos robados.