No solo se acumulan las semanas sin precipitaciones sobre la provincia y la región sino que además es muy elevado el índice de evapotranspiración, es decir la suma de la evaporación del agua desde la superficie del suelo y la transpiración del agua a través de las plantas.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el promedio de los primeros días de enero de evapotranspiración diario medido en la Estación Meteorológica en Cerro Azul, fue de 6,36 milímetros. Los índices de evapotranspiración de Corrientes son todavía más altos: en Caá Catí 8,76 milímetros, Sombrero 8 milímetros, en Mercedes 8,25 milímetros, en Bella Vista 6,61 milímetros, en Esquina 6,81 milímetros.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, el agrometeorólogo del INTA y responsable de la Estación Meteorológica en Cerro Azul, José Olinuk, indicó que “no se habla tanto del fenómeno de la evapotranspiración que es la cantidad de agua que se pierde por evaporación y por transpiración de las plantas. Este concepto es fundamental para hablar de sequía porque tiene que ver con un balance hídrico porque se tiene en cuenta el agua que llega a la superficie de la tierra a través de la lluvia y la que se pierde a través de la evapotranspiración. Lo que está pasando ahora es que no está lloviendo y además el índice de evapotranspiración es alto, por lo que cada día que pasa la situación es más grave”.
El índice de evapotranspiración varía de acuerdo al mes y en base a la longitud del día, la radiación solar y la temperatura, “un extremo del día de hoy está en 9 a 10 milímetros diario”, señaló.
Según explicó, en noviembre la estación meteorológica de Cerro Azul registraba un índice de evapotranspiración promedio menor a los 6 milímetros y “estábamos bien porque había precipitaciones, además cuando llueve baja la temperatura y esto también incide en la disminución de la evapotranspiración. En la actualidad no llegaremos a valores mucho más altos que los actuales, podemos llegar hasta a 11 milímetros en un día, lo que es muchísimo porque si se extiende en el mes es como 300 milímetros de agua que se pierden y si no tenemos lluvia podemos tener un déficit hídrico importante que sería trágico para los cultivos”.
El impacto en los cultivos puede ser muy alto
Olinuk señaló que la sequía es muy importante “pese a que hay lugares donde hubo un nivel importante de lluvias, como en la zona de Cerro Azul donde se registraron 187 milímetros de precipitaciones durante la primera semana de diciembre, con lluvias previas importantes también, pero a las dos semanas sin lluvias y con las actuales temperaturas ya se observa la falta de agua porque nuestro suelo no retiene mucha humedad”, indicó.
Se suman además, “la radiación solar muy alta y la presión atmosférica actual que es relativamente alta lo que significa que no se forman nubes, tenemos el aire muy seco y del sur… toda esta situación ayuda a que los cultivos ya empiecen a sentir la falta de agua”.
Señaló que, aunque el riego ayuda, “los cultivos sienten los efectos de la sequía, el aire está muy seco y hay una gran demanda de humedad.. y puede haber cultivos marchitos incluso teniendo humedad en el suelo porque la demanda climática es muy elevada con estas temperaturas”.
No obstante, indicó que para hablar del impacto en el sector productivo, “hay que evaluar cada cultivo porque un cultivo adulto de yerba mate en un suelo rojo profundo todavía está muy bien porque las raíces van explorando una profundidad bastante importante. Pero un cultivo superficial o en un suelo poco profundo como por ejemplo en las zonas aledañas a la estación meteorológica donde hay muchas piedras a poca profundidad, sufre enormemente y las pérdidas serán importantes. Un cultivo que se hizo el año pasado de yerba, cuando había humedad, ahora está sufriendo porque esa planta tiene poca raíz”.
Déficit hídrico en ascenso
Según detalló, el concepto de déficit hídrico también está relacionado, “porque si hay mucha humedad, la evapotranspiración es mayor, tanto la potencial como la real. Pero si ya disminuye la cantidad de humedad del suelo como ocurre en la actualidad, también baja la evapotranspiración real porque ya no hay humedad aunque la potencial sigue siendo elevada. Esa diferencia entre una y otra es lo que llamamos déficit hídrico… la potencial hoy en día puede estar en 10 milímetros por día con estas temperaturas pero con la falta de humedad del suelo ya evapora mucho menos, en estos días ronda 8 milímetros, lo que quiere decir que hay un déficit de 2 milímetros diarios y eso es lo que va agravando esta situación y lo que vemos en los pastos secos y plantaciones afectadas”. De hecho, algunos proyectan para el trimestre enero, febrero y marzo un déficit hídrico que rondará el 60%.