Luego de la denuncia por el robo de madera nativa en el Parque Provincial Piñalito Sur, se decidió la reubicación de los guardaparques que estaban de servicio cuando ocurrió el ilícito. Desde el Ministerio de Ecología se decidió asignar personal de otros parques para reforzar la vigilancia en la zona, mientras se avanza en la investigación.
La principal sospechosa es una familia de madereros. Cabe recordar que en este caso se estima el robo de aproximadamente 40 árboles nativos, valorados en al menos 70 millones de pesos. Entre las especies afectadas se encuentran cedro, incienso, anchico y grapia.
El operativo que llevó a cabo el Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables fue resultado de una denuncia formal. Durante esta acción, se encontraron evidencias que apuntan a los sospechosos. Además, se secuestraron los teléfonos móviles de dos vecinos relacionados con ellos, quienes prestaron declaración en el marco del sumario judicial.
En el relevamiento realizado en la zona del apeo ilegal, se hallaron rastros de una motoarrastradora utilizada para transportar los rollos de madera. Las huellas conducían a un lote privado, donde se descubrió una máquina Caterpillar CAT 518 oculta en la vegetación.
El operativo fue encabezado por el juez de Instrucción N 1 de San Pedro, Ariel Belda Palomar, incluyó el relevamiento del área donde se detectaron los rastros del apeo ilegal. A medida que avanza la investigación, las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos y dar con todos los responsables del robo.