La pandemia de COVID-19 obligó a las universidades a invertir en equipamiento para el dictado de cátedras online como en modalidad híbrida con la presencialidad. En 2023, las casas de altos estudios del país se dieron un debate respecto a la oferta académica, para que haya más estudiantes y se dé una mayor retención de alumnos.
Ese debate se vio impulsado no solo por las condiciones económicas de las familias, sino por la necesidad de brindar herramientas más rápidas que faciliten la incursión de los jóvenes en el mercado laboral.
En marzo de 2023, la rectora de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM), Alicia Bohren, había confirmado que “se está trabajando no solamente en el acortamiento de las carreras, sino de dar esta mayor flexibilidad y movilidad, además de trabajar en un sistema de créditos ahora que está la virtualidad instalada, junto con otras universidades”.
Para ello, “se está haciendo un análisis para las carreras dentro del artículo 42 (Ley de Educación Superior) para establecer no solo un mínimo, sino también un máximo en cuanto a la carga horaria para las carreras de grado”.
Entonces, explicó que “tenemos un piso de horas para las carreras de grado de 2.600 horas, pero en el escenario hay carreras que tienen hasta 4.500 horas para el título de grado”.
Empezando 2025, la Facultad de Ciencias Económicas de la UNaM, confirmó que ofrecerá una licenciatura de cuatro años de duración y la entrega a la mitad de la carrera, de un título técnico intermedio. Se trata de Marketing, que formará parte de la oferta académica pública, cuando hace ya muchos años que se puede cursar en el sector universitario privado.
Horacio Simes, decano de la unidad académica mencionada, explicó en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones y canal 9 Norte Misionero que “eso resulta una innovación en la facultad, porque se trata de una carrera de cuatro años cuando las de grado tenían cursada de cinco años; e incorporamos el título de técnico, con la validación en un trayecto más corto para incorporarse a ciertos espacios de trabajo, en el mercado laboral”.
Anticipó que “si bien se inicia el primer y segundo año presencial, esperamos implementar la misma modalidad híbrida de nuestras carreras de grado y posgrado, que posibilita el cursado desde tercer o cuarto año de manera remota desde su casa. Para eso hemos invertido en equipamiento”.
Pero hay más: Ciencias Económicas quiere Marketing a distancia en poco tiempo. “Presentamos ante la Subsecretaría de Políticas Universitarias la posibilidad del dictado de la carrera a distancia, que todavía no ha sido aprobado pero tenemos expectativas. No sabemos si este año o el próximo se podrá implementar”, anticipó el decano.
Si bien ahora la UNaM permanece sin atención al público por vacaciones, el contador Simes explicó que hay una preinscripción desde el lunes 3 de febrero de manera digital, escaneando los documentos necesarios. “Una vez validada esa documentación, se acercan en formato papel en la Facultad para cerrar el proceso de inscripción cuando se retome la actividad el 3 de febrero”, indicó.
El decano confirmó que los graduados de otras carreras, como Administración de Empresas, pueden cursar algunas materias para obtener esta otra titulación.
Contador, la más demandada
Si bien las cifras finales de inscriptos se darán a fines de febrero, Horacio Simes anticipó que se observa en las unidades académicas una mayor cantidad de inscriptos para el año 2025.
En particular de Ciencias Económicas, hasta diciembre de 2024, la carrera de Contador ya tenía 400 inscriptos anuales y se convertía en la de mayos demanda estudiantil.
“En este 2025 observamos un incremento en la cantidad de matriculados en todos los niveles de la universidad, cuyos números tendremos a finales de febrero cuando se cierren las inscripciones”, indicó Horacio Simes.
Respecto a la deserción de alumnos, el decano explicó: “Hemos observado una compensación en la matricula global que puede obedecer, por lo que pudimos indagar, a una baja de estudiantes -tanto del interior como de Posadas- por el alto costo de vida, porque las familias sufrieron restricciones presupuestarias importantes que impidió mantenerse en el sistema universitario. Pero también es posible que se haya compensado por una migración del sistema privado al público”.
Preocupación por salarios
Simes indicó que “más allá de las limitaciones presupuestarias, que algunas fueron recuperando recursos para invertir en infraestructura, becas y tecnología, esperamos que el presupuesto siga incrementándose para las universidades”.
“No se volvió a la normalidad pero hemos recibido desde abril o mayo una mejora que esperamos que no solo se sostenga, sino que mejore”, agregó.
Pero advirtió que “ahora nos encuentra más preocupados por los salarios del personal, donde esperamos que el Ministerio de Capital Humano nos dé una respuesta”. De eso dependerá el inicio de las clases y la toma de exámenes.