El Gobierno implementó una nueva desregulación para la industria de la fruta. La nueva normativa establece cambios para el envasado, se elimina la necesidad de pedir autorización para cosechas y las restricciones a la exportación por tipología de productos, entre otras modificaciones. La medida también apunta a la simplificación de trámites y requisitos burocráticos.
Así fue oficializado este lunes a través del Boletín Oficial mediante la resolución 21/25. En los considerandos de la norma se señala que “corresponde unificar la normativa sanitaria de frutas, hortalizas, aromáticas, hongos, algas y semillas comestibles, contemplando todos los lugares de acondicionamiento donde se realice el procesamiento de estos productos, que prevea la asistencia técnica a través de especialistas en inocuidad agroalimentaria, para la implementación, adopción, establecimiento de prácticas y procesos en todas las etapas, para promover las condiciones de inocuidad y la salud de los consumidores”.
En este sentido, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, dijo: “La Resolución 21/25 (y otra que viene mañana), con firma de Sergio Iraeta, implementan una histórica desregulación en la industria de frutas (cítricas, no cítricas, secas y desecadas). Para visualizar de lo que hablamos comparen en la foto adjunta la reglamentación vieja (la pila alta) con la nueva ¡(la pila baja)!”.
El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger anticipó “una normativa liviana”, donde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) trabaje directamente con los productores, ante las pestes que surjan, y realicen “la emisión de certificados fitosanitarios”.
Asimismo, Sturzenegger destacó las desregulaciones que se desprenderán de este proyecto: Se dejará de pedir habilitación de instalaciones y ya no habrá necesidad de revalidarlas anualmente; el productor puede cosechar cuando quiera, ya que se eliminan los permisos de autorización para hacerlo; se elimina toda normativa relacionada con el envasado, ya que pueden ser elegidos por los mismos productores, y las restricciones a la exportación por tipología de fruta; asimismo, se exportará lo que demande el mercado.
Además, “el productor puede cosechar cuando desee, ya que se eliminan los permisos de autorización de cosecha (sí, antes un burócrata te decía si podías cosechar y cuándo). Se elimina toda la normativa que tiene que ver con envases. Los envases pasan a ser una elección libre de los productores”, precisó el funcionario.
El SENASA, además, estará disponible para certificar lo que exijan las autoridades sanitarias de los países importadores, sin embargo, no podrá exigir ningún trámite adicional.
“Se eliminan las restricciones a la exportación por tipología de fruta (antes solo se permitía la exportación de fruta premium). Se exportará lo que demande el mercado. De esta manera los productores van a hacer menos papeleo y el organismo podrá poner mas energía en la vigilancia sanitaria, donde agrega valor. VLLC!”, sostuvo Sturzenegger.
Fuente: Infobae.