The Economist, uno de los diarios de economía más importantes del mundo, destacó la crisis que atraviesan los productores de yerba mate en Argentina tras la desregulación del sector. Según el artículo del medio estadounidense, la medida implementada por el Gobierno en diciembre de 2023 puso fin a la fijación de precios mínimos por parte del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), lo que provocó una caída de más del 50% en el valor que reciben los productores.
El medio consultó a María Ferreira, una productora de Misiones, quien afirmó que los precios actuales “no cubren los costos”. La nota señala que los productores ahora dependen de los diez molinos que controlan la mayor parte del procesamiento y envasado de la yerba.
El artículo recuerda que el sector ya atravesó una situación similar en la década del 90, cuando la eliminación de los límites de plantación derivó en sobreproducción y una baja en los precios. En 2002, la creación del INYM permitió restablecer un esquema regulador, pero en los últimos años la institución impuso restricciones a la siembra.
Desde el Ministerio de Desregulación, la caída de los precios al consumidor es vista como un aspecto positivo, ya que en noviembre de 2023 el costo de la yerba en góndola había bajado un 30% en términos reales respecto del año anterior. No obstante, algunos analistas citados en la nota atribuyen la baja de precios a factores climáticos favorables y a la existencia de un mercado negro en el sector.
Por otro lado, el artículo menciona que una orden judicial suspendió la desregulación de la yerba mate, aunque el INYM aún no puede fijar precios debido a la postura que tomaron la industria y el Gobierno de Corrientes de desconocer el fallo.
A pesar de la crisis, el medio destaca que muchos productores no responsabilizan directamente al presidente por la situación. Según la publicación, algunos valoran la reducción de la inflación lograda por su administración, aunque advierten que el mandatario podría estar “mal asesorado” en lo que respecta a la yerba mate.