CARACAS, Venezuela (El Mundo). El chavismo consumó el nuevo organigrama del país en ausencia de Hugo Chávez. El militar Diosdado Cabello fue reelegido el sábado como presidente de la Asamblea Nacional, lo que lo convertiría en presidente provisional de Venezuela en caso de fallecimiento del líder bolivariano.Junto a Cabello, los diputados Darío Vivas y Blanca Eekhout juraron su cargo como vicepresidentes durante una sesión que se convirtió en un homenaje al presidente enfermo.A falta de misterio (el oficialismo tiene 97 diputados de un total de 165), la elección de Cabello supuso una perfecta puesta en escena del poder que acumula, tanto en la sede legislativa como en la calle. Cientos de simpatizantes chavistas llegados en autobuses desde distintos puntos del país rodearon la sede legislativa desde primera hora de la mañana para acompañar la escenificación del llamado Pacto de La Habana.“Aquí estamos, mi comandante, rodilla en tierra, dispuestos a defender la revolución y rezando por su recuperación”, recitaba una mujer llegada desde Miranda a las puertas de la Asamblea Nacional. Tras ella, las camisetas con el rostro del bolivariano que se regalaban en la calle se agotaban como pan caliente entre tirones y jalones de sus seguidores.Desde el punto de vista político, la sesión del sábado cobró una inusitada importancia ante el papel que puede jugar Diosdado Cabello. El acto supuso también un posicionamiento claro a favor de la estrategia preparada por el oficialismo para la jura del 10 de enero. “No vamos a darle un golpe a Chávez”, constató Cabello adelantándose a la más que probable ausencia ese día del mandatario.Pero la coalición opositora MUD insiste en que el día 10 finaliza el actual mandato de Chávez y si no se juramenta en esa fecha, el líder del Parlamento debe asumir la jefatura de Estado de forma temporal.Otros dirigentes opositores, como Julio Borges, coordinador nacional de Primero Justicia, aceptan que Chávez se mantenga por el momento en funciones, pero no Maduro y el resto del Gobierno, cuyos miembros no fueron electos.Según varios analistas constitucionalistas, el Gobierno corre el riesgo de cometer un acto “inconstitucional” si el presidente no asume el poder el 10 de enero, pues en la historia venezolana nunca se ha retrasado la toma de posesión.Cabello y Maduro confirmaron que “el presidente en ejercicio es Hugo Chávez” y no dudaron en calificar de “falsa” la posibilidad de que sea el presidente de la Asamblea quien asuma las funciones del Ejecutivo a partir del viernes. Según Maduro, está vigente el permiso parlamentario al presidente Chávez. Y se escudó en el artículo 231 de la Constitución, que sostiene que “si por cualquier motivo sobrevenido el presidente o presidenta de la República no pudiese tomar posesión ante la Asamblea Nacional, lo hará ante el Tribunal Supremo de Justicia”.
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