MONTECARLO. La Policía no es la única que busca a Elías Roberto Espíndola (28), más conocido como “Matrix”, el presunto autor intelectual del crimen del empresario Mario Nicanor Cabañas (43). Los familiares del sicario paraguayo Marcos Fabián Martínez Sánchez (36), abatido en el tiroteo que le costó la vida al ex edil montecarlense, juraron vengarse del hombre que lo “contrató” para el que se transformaría en su último trabajo. Por eso, también lo buscan intensamente para cumplir con esa “vendetta”.Así lo pudo establecer PRIMERA EDICIÓN en las últimas horas gracias a fuentes de la investigación, quienes confirmaron la sigilosa búsqueda de “Matrix” por parte de los Martínez Sánchez, a la par de los efectivos de la comisaría de Montecarlo y de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional III, con asiento en Eldorado.En ese sentido, trascendió también que en las últimas horas Espíndola se comunicó con un conocido vía mensaje de texto y aseguró que no tenía nada que ver con el crimen y que se encontraba trabajando en Buenos Aires. Los detectives creen que se trata de una maniobra que busca desviar la investigación. La de la Policía y quizás también la de los hombres que juraron pagar con sangre la muerte del sicario paraguayo.Así las cosas, a un mes del asesinato que conmovió a Montecarlo y a la provincia, el paradero de uno de los hombres más buscados por la Justicia misionera sigue siendo un misterio.Asesinato y conmociónEl domingo 15 de diciembre de 2013, Montecarlo despertó con la noticia del crimen. Cabañas, funcionario del Pami local, ex concejal radical y empresario de remises, había sido ultimado a balazos en medio de un feroz tiroteo registrado en la habitación de su casa, en calle Corrientes y avenida Libertador del centro de la localidad.Apenas minutos habían pasado de las 7 cuando en el lugar irrumpieron dos sujetos y sorprendieron a la madre de Cabañas en la puerta. Martínez Sánchez entró al inmueble y fue directo a la recámara del dueño de casa. Pero Cabañas estaba armado y en el intercambio de balazos ambos perdieron la vida.Espíndola, señalado por la madre como quien la retuvo en la puerta de la casa, escapó a la carrera al percatarse de lo que había sucedido. Al día siguiente, la Policía halló en una obra en construcción cercana la remera que tenía puesta “Matrix”. Estaba ensangrentada y envolvía un arma de fuego. El fugado fue reconocido por la madre gracias a que era común que compartiera tiempo con Cabañas. Ambos eran socios en al menos un automóvil tipo remís de los tantos que el ex edil regenteaba. Incluso aseguran que Espíndola era una suerte de encargado del negocio en Jardín América, de donde es oriundo.Para los investigadores, una diferencia en ese negocio fue lo que desató el conflicto entre ambos. Por eso la principal teoría indica que “Matrix” ideó el crimen y contrató a Martínez Sánchez, oriundo de Ciudad del Este y con antecedentes por el doble crimen de un juez paraguayo y su primo, entre otros tantos hechos de sangre.Familia “de peso”Con el transcurrir de los días, se supo que Martínez Sánchez tenía un pesado legajo en la Justicia paraguaya. También parte de su familia, que días después no dudó en llegar por el Paraná a Misiones y robarse el cadáver del sicario de una funeraria de Eldorado, un hecho que alcanzó repercusión nacional. Fue la hermana de Martínez Sánchez quien horas antes de ese robo había dialogado con la Policía y le había contado el pasado de su hermano. También, que ella “era buenita”, pero que sus hermanos “no tanto” (sic) y que estaban a la caza de Espíndola, ya que lo consideraban culpable por haber llevado a la muerte a Martínez Sánchez.Esa información terminó de confirmarse en las últimas horas por los detectives de la fuerza provincial, quienes aseguran que a la par del trabajo policial están los hermanos del sicario paraguayo. “Lo están buscando y, al ritmo que van, no es descabellado pensar que puedan encontrarlo”, refirió a este diario alguien cercano a la investigación.Por eso, desde la fuerza redoblaron los esfuerzos en la zona de Jardín América, donde sospechan que “Matrix” puede estar escondido, más allá de que la semana pasada un conocido de Espíndola recibió un mensaje de texto que, para los investigadores, es un intento por desviar la búsqueda. “Me están acusando ‘de balde’. Yo sigo acá en Buenos Aires, trabajando donde siempre”, fue el supuesto mensaje enviado desde el teléfono celular de “Matrix”. Aunque no se descarta nada, para la Policía resulta demasiado obvio. De todas maneras, el trabajo investigativo también se volcó en parte a la capital nacional, donde Espíndola vivía hasta unos pocos días antes del crimen de Cabañas. Son todas hipótesis, aunque la búsqueda del prófugo sigue por parte de la Policía a un mes del episodio. Y también, aseguran, la de la familia Martínez Sánchez, que prometió no detenerse hasta hacer pagar la muerte de Marcos Fabián. Una amenaza de temer. Las hipótesis dela búsquedaEstá claro que en este tipo de búsquedas la Policía no puede descartar ninguna teoría. Sin embargo, de manera extraoficial, varias fuentes aseguraron que la fuga de Espíndola hacia Paraguay, como se había dicho en un principio, es descabellada teniendo en cuenta la venganza que prometieron los familiares de Martínez Sánchez.Como PRIMERA EDICIÓN publicó semanas atrás, tampoco es descabellado pensar que “Matrix” esté escondido en alguna zona no habitada de la provincia e intente regresar a Jardín América. Por eso la Policía mantiene la vigilancia en Misiones. Y por último, también existe la posibilidad de que haya regresado para “perderse” en Buenos Aires.
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