Cansados de reclamar fondos para el comedor toman una escuela

POSADAS. Los padres de los alumnos de la Escuela 609 del populoso barrio San Jorge reclamaron ayer que el Gobierno garantice el comedor escolar para que sus hijos puedan volver a tener jornada completa. La comunidad educativa de la 609, escuela que ayer cumplió 19 años, no pudo festejar como corresponde. Es que este establecimiento, que tiene jornada completa desde que abrió sus puertas en 1995, ahora corre el riesgo de perder la modalidad porque el Estado no garantiza en tiempo y forma los fondos para el comedor escolar. El problema con el comedor, según contaron los padres a PRIMERA EDICIÓN, comenzó en octubre del año pasado. Se estima que la deuda a los proveedores asciende a 30 mil pesos, por lo que este año los alumnos ya no cuentan con el almuerzo. “Desde la dirección, nos explicaron la situación al inicio del ciclo lectivo y nos pidieron que retiremos a nuestros hijos a las 12 porque ellos no pueden darles el almuerzo y es imposible tener a un chico ocho horas sin comer. Nuestros hijos tenían una jornada escolar de 8 a 16 y ahora la supervisora quiere sacar la jornada completa. Pero los padres estamos en total desacuerdo y vamos a reclamar hasta que el Consejo General de Educación (CGE) garantice los fondos para normalizar el funcionamiento del comedor escolar para todos los alumnos”, contó uno de los padres, Leonardo Alegre, que ayer encabezó el corte de la avenida Cocomarola, ubicada a unos metros del edificio educativo, junto a otros 50 papás. Toma de la escuelaLa protesta de los padres comenzó este lunes cerrando la escuela y no enviando a sus hijos a clases. Aunque apoyan la lucha de los padres, los docentes no participaron en el corte de la Cocomarola por temor a sanciones. Todos los días asisten al establecimiento y cumplen su horario de trabajo en la vereda, porque las puertas están cerradas con candados. Paradójicamente, según la política educativa que el actual Gobierno dice seguir y que está plasmada en la Ley Nacional de Educación, las primarias deben tener jornada extendida o completa. Pasar en forma paulatina de cuatro a ocho horas de clases. En esta escuela donde la jornada completa funciona desde hace 19 años, el Estado no envía los fondos para el almuerzo de los alumnos.