POSADAS. Tal como lo anticipó PRIMERA EDICIÓN, la imposición de un desgastado Daniel Fiorino al frente del Sistema Provincial de Teleducación y Desarrollo (Sipted), sigue generando rechazos. Por su administración y por sus decisiones.Ayer, un grupo de trabajadores y delegados de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Misiones, tomó pacíficamente las instalaciones del organismo ubicadas en avenida Uruguay casi Monteagudo de esta capital, dando inicio a un paro de actividades que seguiría durante la jornada de hoy.Pasado el mediodía de ayer, los trabajadores que mantuvieron cerrado el acceso a las oficinas, decidieron “flexibilizar” la protesta y hoy se habilitaría el ingreso a pesar del paro.Los manifestantes reclamaron la restitución en sus actividades de dos trabajadores, una de ellas delegada gremial, a quienes se “cambió de tareas”, tras el carpazo del año pasado.En medio de la protesta de ayer, hubo apariciones de la Policía de Misiones y del director de Administración del Sipted, Agustín Suárez, con quien se dio un fuerte intercambio de opiniones que puso tensa a la fría mañana.Tanto a Fiorino, como a Suárez, se los responsabiliza de que haya áreas como Producción sin actividad tercerizando tareas cuando existe personal para hacerlo, que se haya incrementado el plantel político del Sistema, “especialmente en el número de asesores y contratados”, confirmaron ayer en la vereda del ente.“Hay persecución”El secretario adjunto de ATE Misiones, Antonio Martínez, explicó a este diario que “entendemos que hubo una resolución de traslado de sector de trabajo de una delegada y de una afiliada. Es una persecución gremial, por lo tanto, la asamblea decidió comunicar al sindicato una acción que es la que se realizó”.Martínez aseguró que “lo único que recibimos fueron agravios por parte del director administrativo que vino a querer ingresar” y se encontró con el lugar cerrado con una bandera argentina y una asamblea.El dirigente cargó contra los traslados dispuestos por Fiorino: “Especialmente en el Sipted, hay persecución, apriete”. Agregó que “se castiga a los afiliados de ATE y ponemos en vigencia la Ley de Asociación Sindical. La violencia laboral debe ser desterrada de la democracia, por eso acompañamos a los trabajadores”.Sobre la conducción de Fiorino, el secretario adjunto, Antonio Martínez opinó que “tiene falta de capacidad de gestión como el responsable de administración. Tras la protesta del año pasado, como respuesta, decidieron que ahora los contratos se renuevan cada seis meses y no cada un año. Eso da la pauta del desinterés en la estabilidad laboral y emocional, porque los trabajadores cumplen actividades sin saber de su continuidad”.Finalmente, Martínez dijo que “tanto el Sipted como otros organismos y ministerios se convirtieron en cajas políticas. Seguiremos luchando por tener una carrera administrativa, con mejores condiciones de trabajo y llegar a una jubilación digna. Acá se festejan 30 años de democracia, pero los aprietes están a la orden del día”; y aseguró que los conflictos continuarán si sigue Fiorino: “Habla de diálogo, pero lo primero que te hace es una denuncia policial. No tiene madurez y no sabe gobernar su sector”.
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