POSADAS. El alcohol está implicado en la mitad de los accidentes de tránsito que provocan muertes o incapacidades definitivas, según organizaciones que bregan por la educación vial en nuestro país. En Misiones, donde las recientes estadísticas publicadas en exclusiva por PRIMERA EDICIÓN hablan de uno de los años más trágicos en cuanto a este tipo de hechos en los últimos tiempos, esta realidad sigue golpeando sin misericordia. Ayer, con las primeras luces del día, un violento choque frontal entre dos automóviles dejó como saldo un fallecido. Ocurrió sobre la transitada avenida Centenario -entre Santa Catalina y Tomás Guido- de esta capital. Uno de los conductores involucrados tenía 2,25 miligramos de alcohol en sangre (mucho más de los que permite la ley) y, por si fuera poco, el otro joven al volante se negó ante las autoridades a realizar el examen de alcoholemia, haciendo uso de su derecho. Sin ánimos de cargar responsabilidades en el lamentable episodio, algo que es exclusivo de la Justicia, desde este medio simplemente se refleja una circunstancia o factor dentro de todos los que existieron en la violenta colisión y que pueden haber sido determinantes. No obstante, los peritos de la Policía tendrán la última palabra. El hechoA las 5.45, en la esquina de la avenida Centenario y la calle Pedro Correa (entre Santa Catalina y Tomás Guido), y por causas que son motivo de investigación, chocaron de forma frontal un vehículo Ford Orion que iba en sentido oeste-este, guiado por un joven de 29 años que viajaba solo, y un Fiat Uno que circulaba en sentido contrario y era conducido por otro muchacho de la misma edad, acompañado por tres personas más, identificadas por los uniformados como Santiago Sánchez (34), una joven de 28 años y César Raúl Rodríguez (24). Como consecuencia del brutal impacto, todas las personas involucradas sufrieron lesiones de distinta consideración. Sin embargo la peor parte se la llevó César Rodríguez, quien estaba sentado en el asiento ubicado detrás del conductor. El joven experimentó heridas severas y, pese a ser trasladado de urgencia al hospital Ramón Madariaga, llegó a dicho centro asistencial sin signos vitales. Posteriormente, ya con personal de la comisaría Segunda en la escena, además de efectivos de la Dirección Criminalística para las pericias, un bioquímico de la fuerza estableció que el joven que iba al volante del Ford Orion dio positivo al test de alcoholemia (2,25 miligramos por litro de sangre), casi quintuplicando lo permitido por la actual ley (0,50), por lo que el Juzgado Penal interviniente dispuso su detención en averiguación del siniestro vial, tal como lo informó el departamento de Prensa de la Jefatura de Policía. En tanto que el conductor del Fiat Uno se negó al alcohotest. Indagado por el juezFuentes del caso señalaron que el joven detenido será trasladado a sede judicial posiblemente mañana, donde será indagado por el magistrado interviniente, Marcelo Cardozo (titular del Juzgado de Instrucción 1 de Posadas). La causa fue caratulada como “homicidio culposo, delito imprudente”, agregó un portavoz del caso.
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