La igualdad del viernes entre Atlético Huracán y Atlético Posadas dejó la sensación, sobre a todo al primero, que sirvió de poco, pues ahora ambos deberán jugarse la última ficha para acceder a las semifinales en la última fecha del torneo Clausura de Primera División.En la primera etapa abrió la cuenta Brian Sorghe para el Globo, mientras que en la segunda etapa de penal, Gustavo Maidana empató de penal para el Decano. Ahora ambos tienen 15 puntos y deberán ganar sus últimos compromisos (frente a Candelaria y Brown, respectivamente) y esperar que los que están arriba no sumen para meterse entre los cuatro primeros.El primer tiempo fue bastante enredado, pero el equipo local logró la apertura a través de Sorghe, a los 32 minutos.La falta de claridad en el manejo del balón contribuyó a que el juego se tornara más luchado que bien jugado, pues ninguno de los dos fue capaz de bajar el balón y darle claridad al desarrollo de las acciones, pues en varias ocasiones se apresuraron más de la cuenta, en lugar de cuidar el balón y jugarlo al compañero mejor ubicado. Dentro de la escasez de juego asociado, el local intentó a partir de algunas aventuras individuales complicar a la última línea adversaria. Mostraron actitud En la segunda etapa, se vio lo mejor del juego, pese a lo complicada que es la cancha del Globo, pues ambos se jugaron el todo por el todo en ofensiva, pero no lograron imponerse sobre el rival en el trámite.A los 21’ “Cuchi” Maidana de penal estableció la igualdad en el partido tras convertir. El empate sirvió para que ambos le metieran más actitud en querer quedarse con el triunfo, pero faltó el gol.Tanto uno como otro tuvo alguna chance frente al arco del rival, pero fracasaron en la punta final. Tal vez lo más claro haya sido un remate desde afuera del área que rozó el travesaño de parte del ex-goleador de Crucero, Luis Buera.El Decano con más ímpetu que juego bien hilvanado llegó hasta el área rival, pero careció de profundidad para comprometer seriamente al arquero visita, Leo Avalos, que no tuvo tantos inconvenientes.La falta de claridad en los metros finales del terreno de juego fue una síntoma común que tuvieron los dos equipos, pues en varias ocasiones sobraron ganas, pero faltó claridad en el pase final al compañero mejor ubicado para empujarla adentro del arco rival. En definitiva el reparto de puntos entre estos dos elencos, que necesitaban sumar de tres, dejó la sensación de sabor a poco para los entrenadores José Parracini y Cristian Ríos, los que deberán ganar y esperar en la fecha final.
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