Los informes de Inteligencia con que se manejan en la Justicia Federal revelan que en Misiones, al menos por el momento, no hay cocina de cocaína. “Lo contrario ocurre en Encarnación”, indicó una fuente consultada por PRIMERA EDICIÓN.“La droga que ingresa a Misiones llega cortada a un 70 por ciento, como máximo, y aquí se la hace rendir cinco o seis veces”, agregó el informante.El dato no es menor, dada la proximidad geográfica con la vecina ciudad paraguaya, pero otra información despierta mayor preocupación en las autoridades argentinas: la creciente versión de que en Misiones ya habría plantaciones de marihuana.La teoría no es descabellada. De hecho, en Jardín América, una región considerada históricamente como “frontera caliente”, semanas atrás se desarticuló una banda dedicada a la venta de cannabis sativa y clorhidrato de cocaína, algo impensado hasta no hace mucho.En el norte, más precisamente en la ciudad de Puerto Iguazú, el avance y crecimiento de la venta de una sustancia alucinógena, altamente adictiva, conocida como “pedra”, hace estragos en los estratos juveniles. Allí se han detectado casos de niños de diez y once años que gravísimos problemas de adicción.
Discussion about this post