El grupo de personas camina resignado bajo la llovizna; algunos ruegan silenciosamente que se mantenga así, por lo menos para no empaparse tanto. Ya caminaron seis cuadras y todavía faltan otras cinco, para llegar hasta la parada donde toman el colectivo de la línea 26, situada en Almirante Brown y Jauretche. Saltar charcos, y evitar el barro se complica. Son las 4.30 de la madrugada. Karina está embarazada y tiene que llegar al Hospital para hacerse controles, al lado de ella está Juana quien lleva a sus nenes de 5 y 8 años a la escuela. Felipe, un jubilado, no puede evitar un ataque de tos, Blanca, su hija, que lo tiene que acompañar hasta la oficina del Pami se indigna porque vuelve a recordar que la empresa de colectivos, en manos del Grupo Z, les quitó el colectivo y los dejó a pie hace ocho años. Hasta ahora, pese a los innumerables pedidos y reclamos, no hay un sólo indicio que les haga pensar en que van a dar marcha atrás en la decisión. FundamentalEn 2008, el servicio de la línea 26 en todos sus ramales (Hospital y Centro) que conectaba a los vecinos del barrio 25 de Mayo con la ciudad, dejó de realizar el recorrido completo a lo largo de la avenida Almirante Brown en los tramos desde Jauretche hasta Eva Perón. La decisión perjudicó estimativamente a 300 personas, quienes desde entonces se quedaron sin la vital prestación del transporte público, y a ocho años no tienen respuestas sobre la reposición. “La gente del barrio está obligada a caminar, en muchos casos hasta doce cuadras para llegar a la parada, se expone al frío, la lluvia o los calores intensos. Su retorno sería devolvernos un derecho”, exigió el presidente barrial Rafael Marcenaro, quien la semana pasada volvió a presentar distintas notas a la empresa Casimiro y también a la dirección municipal de transporte, para pedir la pronta restitución de la prestación.“El 26 es la única línea que conectaba los barrios en la zona; el 27 va por Blas Parera y el 7 por Martín Fierro hasta Chacabuco, con lo cual el desvío y las caminatas son mucho peores. Esta es mi preocupación: hay muchísima gente que tiene que caminar para salir o llegar a sus casa y son muy castigadas por las condiciones del tiempo. Están los que van a la escuela, al hospital, que viajan y tienen que llegar la Terminal de Ómnibus, en fin mucha gente. Es un derecho que nos quitaron y lo queremos de vuelta, no pedimos algo que no se puede hacer, simplemente que nos devuelvan lo quitado”, describió.“Nunca más pasó”Desde que la empresa cambió el recorrido, una “arbitraria” decisión del Grupo Z, según dijo a PRIMERA EDICIÓN el presidente barrial Rafael Marcenaro “nunca más volvieron a pasar por acá. Al principio se nos explicó que iba a ser un cambio momentáneo, porque se había asfaltado Jauretche, y la transitabilidad era mejor. Después se habló de inseguridad y ahí dieron por cerrado el tema, pero ¿qué culpa tiene la gente? Acá la mayoría son personas humildes y trabajadoras pero de bajos recursos, el transporte público es vital. “Nunca nos explicaron las causas de la decisión, simplemente un día ya no pasó el colectivo y listo. Así transcurrieron ocho años.“Quedó un montón de gente a la deriva y es injusto. Para defender la decisión, en su momento se habló de caminos en mal estado e inseguridad, pero las condiciones del barrio no son las mismas de entonces; la avenida (Almirante Brown) pese a ser de tierra está en buenas condiciones y la seguridad está reforzada”, graficó.
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