El legislador de Trabajo y Progreso (TyP)?Claudio Wipplinger, desestimó la discusión entre la Comuna capitalina y las empresas de transporte urbano de pasajeros por la reconstrucción de parte de la Estación de Transferencia de la avenida Quaranta, que se encuentra paralizada desde hace meses por la existencia de un caño maestro de agua potable debajo de la estructura que impide el uso en las condiciones actuales. Wipplinger advirtió que la no habilitación de infraestructura no es impedimento para la habilitación del trasbordo de un colectivo a otro para llegar a distintos puntos de la ciudad pagando un solo boleto. El diputado provincial recordó que en Mendoza se aplica desde 2012 y con mucho éxito, un sistema de trasbordos similar al prometido para los usuarios de las ciudades de Posadas, Garupá y Candelaria, pero que prescinde de las costosas y burocráticas estaciones de transferencia, las que ni siquiera se utilizan hoy en Curitiba, ciudad brasileña tantas veces puesta como ejemplo por los promotores del Sistema Integrado de Transporte Metropolitano. El sistema de trasbordo que se aplica en Mendoza y en otras capitales simplemente utiliza la tecnología de la tarjeta electrónica: el sistema habilita la posibilidad de que el usuario tome un segundo colectivo antes de los noventa minutos de haber subido al primero, con costo cero para el segundo viaje. “Si realmente hay voluntad política de que se cumpla la promesa que se le hizo a los usuarios en relación a que iban a poder viajar de un punto al otro de la ciudad pagando un solo pasaje, la solución es sencilla y se puede aplicar mañana mismo”, aseguró. “Un show para entretener”Wipplinger señaló que “siendo sencilla y perfectamente posible” la solución para miles de usuarios, que todavía pagan doble pasaje para ir a trabajar cuando debieran pagar uno solo, “estimo que toda la discusión sobre quién arregla la estación de transferencia de la avenida Quaranta es simplemente un show para entretener, que además hace que la situación de perjuicio para el usuario se extienda en el tiempo con una supuesta justificación que no es tal”. El legislador aseguró que el concepto de estación de transferencia es obsoleto cuando hay boleto electrónico, y además es burocrático y le hace perder tiempo al usuario, por lo que las inmensas estructuras “debieran destinarse para mercados concentradores, ferias francas u otro uso público más adecuado para la millonaria inversión que realizó el Estado”. Con la tarjeta Sube “se puede habilitar de inmediato el uso de trasbordo en todos los puntos de contacto de las distintas líneas en toda la ciudad”, reiteró.Recordó que en Mendoza, donde se aplica con éxito y sin las millonarias inversiones en estaciones de transferencia, los usuarios pagan un solo boleto y pueden subir no sólo a los colectivos, sino también al trolebus o al metrotranvía, todo dentro del lapso de noventa minutos. Antecedente“Cuando brindábamos el servicio con Nuestra Señora del Rosario, implementamos por motu propio un sistema de trasbordo con un solo boleto que fue exitoso. En ese tiempo se entregaba un boleto o ticket especial para el que iba a usar el trasbordo en otra línea, pero hoy esto está largamente superado por las posibilidades de la tarjeta Sube”, refirió respecto del antecedente local del sistema de trasbordo con un solo pago.
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