El temor a ser víctima de un asalto en la Zona Centro trascendió a la sensación imperante en viviendas de barrios de Oberá y localidades vecinas.Está presente en sus chacras y colonias, y afecta directamente a los agricultores, que no sienten miedo por perder sus pocos ahorros, sino a perder la vida ante la violencia delictiva.Contra este problema marcharon ayer -miércoles 13- por el centro de esta ciudad doscientas personas, víctimas directas de las bandas o gavillas de bandidos.“Estamos cansados de la inseguridad, seis veces me robaron y de la peor manera. Hace unos días entraron hombres a mi casa, llamé a la policía y tardaron cuarenta minutos en venir. La última vez que nos robaron maniataron a mi sobrino, mi hija que tenía ocho años, a mí, a todos, por eso decimos basta con la marcha”, resumió a PRIMERA EDICIÓN una de las manifestantes.Gustavo Krohn, hijo de uno de los colonos que fue atacado a golpes y robado en su chacra de Campo Viera, encabezó ayer a las 9 la caminata que recorrió las sedes de los juzgados de instrucción y Tribunal Penal obereño.“En la chacra se siente vulnerabilidad y miedo, por eso nos movilizamos, hay que lograr frenar los delitos de esta magnitud, golpean a cualquier persona, amenazan con armas de fuego y lo hacen drogados, alterados, capaces de matar en cualquier instante”.Admitió que tomaron y recomiendan medidas para prevenirse de los crímenes: “No se trata de armarse o encerrarse en la colonia. Ahora preferimos tener algo de dinero guardado para darle a los asaltantes, así al menos nos aseguramos que no maten a nadie, porque si no tenés nada ahorrado en tu casa se vuelven más violentos y golpean sin piedad”.Remarcó que los investigadores de la Unidad Regional II siguen los movimientos de al menos diez bandas. “En tres de ellas aseguran que actúan asaltantes paraguayos pero, durante los últimos días, las sospechas apuntan también a ciudadanos colombianos”.Para la familia Krohn, las circunstancias del asalto que sufrieron despejan toda duda. “No son robos al voleo, estas bandas marcan a sus víctimas, en nuestro caso ni los perros ladraron alertando la presencia de extraños cerca”.“Necesitamos sentirnos seguros y lo que vemos es que la Policía investiga los casos, pero las demás autoridades políticas y judiciales se muestran indiferentes. Eso provoca mayor sensación de indefensión. No hay que tomar grandes medidas contra la inseguridad, hay que acompañar y proponer”. Detrás de este objetivo el próximo miércoles 20 de julio fue fijado para la nueva caminata. “Al mediodía, desde el colegio Mariano vamos a marchar para que más gente pueda acompañarnos”, amplió Krohn.EldoradoDurante la tarde de ayer en esta ciudad se desplegó una medida de protesta similar. Alrededor de 150 personas firmaron un petitorio al Poder Ejecutivo provincial solicitando mayores medidas preventivas para combatir los asaltos que durante los días quedaron marcados por el homicidio del empresario arnenero Enrique Faubel (66).En la vivienda del “armero” habrían hallado evidencias de varios asaltosTras la detención del jueves de un hombre de 63 años en cuya vivienda fueron halladas varias escopetas, revólveres y pistolas, los investigadores de la Unidad Regional II, confían en que se obtuvo suficiente evidencia para desbaratar varias de las bandas que acechan campos y chacras de localidades próximas a esta ciudad, como Campo Viera y Campo Ramón. Durante las últimas horas también fueron secuestrados teléfonos celulares que aportarían mayores datos. Pero también fueron demoradas tres personas a disposición de la Justicia. Estos hombres tendrían vinculación directa con al menos tres golpes cometidos en menos de dos meses. Trascendió que se trabaja intensamente para atrapar a dos personas más, con antecedentes penales.Estos hombres estarían vinculados al asalto del 10 de mayo a la familia Günther en Campo Ramón y al atraco al matrimonio Krohn. En cuanto al procedimiento realizado el martes en jurisdicción de la seccional Cuarta de Oberá, en la casa del “amero” fueron secuestradas catorce armas de fuego, 64 piezas sueltas para reparar escopetas o rifles, además de una importante cantidad de machetes, cuchillos y puñales.
Discussion about this post