Según las primeras pericias, la lesión que le provocó la muerte a Adolfo Dos Santos (63) fue el puntazo que recibió en el abdomen y que le provocó evisceración. No obstante, en las últimas horas se supo que el hombre recibió otras tantas heridas sobre los costados del tronco, lo que indicaría que fue atacado desde varios flancos y por numerosas personas.Así de salvaje habría sido la agresión que le provocó la muerte al hombre que trató de mediar en una batalla campal entre dos bandas, el último domingo en el barrio Irigoyen de Apóstoles. Dos Santos pagó con su vida ese intento por “pacificar” la zona. Esos detalles médicos, que aportan un poco más de claridad a la investigación, no fueron los únicos que se suscitaron en las últimas horas en el seno de la investigación que lleva adelante el magistrado Miguel Ángel Faría, titular del Juzgado de Instrucción 4 de la Primera Circunscripción Judicial.Por el momento son seis los aprehendidos en averiguación del he-cho. Llegaron a ser ocho, pero dos de ellos fueron liberados ayer en virtud de que tenían 14 y 15 años y fueron declarados inimputables, según pudo confirmar PRIMERA EDICIÓN.Así las cosas, permanecían anoche tras las rejas cuatro mayores de entre 18 y 27 años junto con dos adolescentes de 17, quienes debido a su edad pueden comparecer en caso de tener responsabilidad en el hecho, aunque bajo un tratamiento diferente al de los mayores en caso de ser hallados culpables.Al respecto, los investigadores de la Unidad Regional VII de Apóstoles consideran que el caso está esclarecido. En las últimas horas continuaron con los allanamientos en las viviendas de los aprehendidos y lograron el secuestro de cuatro machetes con manchas que serían de sangre.En las próximas horas, los acusados serán indagados por el juez Faría, quien aguarda además por los testimonios de potenciales testigos. Eso no parece ser una tarea sencilla, en virtud de que en el barrio Irigoyen reina el temor e incluso las amenazas a los vecinos. Dos Santos fue agredido de varios puntazos alrededor de las 22.30 del último domingo cuando intentaba mediar en una pelea entre bandas de los barrios Irigoyen y La Cantera, hacia el?Este de Apóstoles. Las fuentes aseguraron que el pleito se desató a raíz de antiguas diferencias entre los dos grupos que se profundizaron un día antes, el sábado, en medio de una celebración que se realizaba en la iglesia San Cayetano, emplazada en la zona.Después de una confusa intervención policial en la que una joven de 22 años sufrió el “roce” de un disparo de arma de fuego en la cabeza, los protagonistas del pleito se habrían jurado venganza. Y esa “revancha”?no tardó en llegar:?fue el domingo por la noche y se cobró la vida de Dos Santos, que intentaba mediar, aparentemente en razón de que uno de sus familiares era salvajemente agredido por los irascibles. “Les decían a los niños que los iban a matar”PRIMERA?EDICIÓN recorrió ayer el barrio Irigoyen, donde chocó con el silencio de los vecinos, quienes prefieren no hablar por temor a resultar víctimas de más agresiones. Sin embargo, una mujer, quien se identificó como Karina, decidió romper el silencio y contó en detalle parte del infierno que vivieron el último fin de semana.“Era tierra de nadie. Todo ya comenzó el sábado cerca de la capilla y siguió el domingo, cuando apedrearon mi casa. Ese día los chicos de 6 y 7 años estaban jugando al fútbol cuando ellos llegaron y los amenazaron de muerte”, contó la mujer, visiblemente conmovida. Karina relató que enseguida recibieron una lluvia de piedras y que algunos vecinos salieron en defensa de los menores. “Entonces se fueron, pero volvieron a la media hora y ya eran como sesenta”, sintetizó.Sin embargo, lo peor vino después. “Patearon la puerta, rompieron los vidrios y entraron a mi casa. Escuchamos que decían ‘el encendedor, el encendedor’, con la intención de prender fuego todo. Fue tierra de nadie hasta cerca de las 3 de la mañana”, narró.Karina indicó que tanto ella como otros vecinos fueron amenazados, pero decidió hablar porque quiere que todo se sepa y que las autoridades tomen cartas en el asunto. “Estamos preocupados, ahora está todo tranquilo, pero no sabemos que pasará mañana o pasado”, finalizó.
Discussion about this post