A través del decreto 302/17, publicado el 2 de mayo en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Mauricio Macri, el jefe de Gabinete Marcos Peña, y el ministro de Agroindustria Ricardo Buryaile, se dio a conocer la decisión que afecta a la SAF.A nivel nacional se interpretó como una medida que demuestra desinterés hacia las pequeñas producciones y prioriza a las grandes producciones agrarias de la zona de la Pampa Húmeda. Hay preocupación en los sectores de pequeños agricultores familiares, minifundistas, campesinos e indígenas. La medida no llama la atención dado que la secretaria de Desarrollo Territorial y de Agricultura Familiar (SAF) contaba con 1.500 técnicos en todo el país y solo 300 tenían estabilidad. El resto tenía contratos de renovación anual.“Al mismo tiempo de esta decisión no hay presupuesto para llevar a cabo las tareas cotidianas de las reparticiones de las distintas provincias”, dijo Natalia Morales, una delegada sindical de la SAF.Por su parte, según estableció el decreto, los programas de ayuda para la agricultura familiar se procesarán a través de los programas del Instituto Nacional de Tecnología Agrícola (Inta) Cambio Rural y ProHuerta. Sin embargo las posibilidades de que se lleven adelante son pocas dado el recorte de presupuesto que recibió el Inta en el último tiempo.De hecho, el Inta ya informó que no tiene presupuesto ni infraestructura para asumir las tareas que realizaba la desaparecida secretaría de Agricultura Familiar. Representantes de Inta emitieron un comunicado donde indicaron que “La creación de la nueva Secretaría de Agricultura Familiar, Coordinación y Desarrollo Territorial, dependiente del Minagro, no tiene como consecuencia un traspaso de las atribuciones de la anterior Secretaría de Agricultura Familiar hacia el Inta. Así, las funciones de esa secretaría permanecen dentro de la órbita de la cartera agropecuaria nacional y de sus programas específicos”.“Del mismo modo, como organismo del Estado nacional, el Inta articula su intervención territorial con diversos actores, con quienes lleva adelante diferentes programas de desarrollo integral: junto al Minagro, trabaja con 1.406 grupos de Cambio Rural, que cumplirá 25 años el año próximo. Y desde el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación lleva adelante el programa ProHuerta, una política pública con 26 años de trayectoria que actualmente posee 455.000 huertas agroecológicas y beneficia a más de 2,80 millones de personas en todo el país”.En tanto, PRIMERA EDICIÓN consultó acerca de esta medida a la secretaria de Agricultura Familiar de Misiones, Marta Ferreira, quien destacó que esta provincia es la única que mantiene el rango de Ministerio en esta área.“Esta claro que el Gobierno nacional está impulsando un cambio de rumbo en todo lo que es agricultura y desde ahora seguramente no funcionará como lo venía haciendo”, señaló Ferreira.Consultada acerca de la implicancia de esta medida en Misiones, indicó que “no teníamos trabajo en conjunto con ellos y siempre nos costó coordinar los temas en el terreno porque siempre tuvieron una visión muy nacional de la agricultura y nosotros tenemos una mirada más misionerista”.“Ellos bajaban sus ideas y las ejecutaban pero con la visión nacional. Desde hace muchos años no coordinábamos juntos un programa. Creo que en 2009 y 2010 fueron los últimos años donde trabajamos juntos”, añadió Marta Ferreira, secretaria de Agricultura Familiar de Misiones.
Discussion about this post