Ya comenzó a regir el primer tramo del aumento del boleto de transporte urbano, pero la bronca y tristeza todavía perdura entre los usuarios, quienes no se resignan a bajar los brazos en la lucha por tener un mejor servicio.
El presidente de la Unión de Comisiones Vecinales, Daniel Morel aseguró que en los últimos días se reunió con sus pares de diferentes barrios y acordó insistir a las Comunas del Sistema Integrado para que exhorten a las empresa prestatarias a mejorar el servicio.
En una comunicación con PRIMERA EDICIÓN, Morel rechazó el incremento de la tarifa y también castigó al empresariado.
De todas las presentaciones que hicimos en el último año solo uno fue tratado y solucionado, que encima se resolvió porque los vecinos de Itaembé Guazú se animaron a cortar la ruta, perjudicando el bolsillo de la empresa.
Pero, vamos a seguir intentando para que vengan (a la Provincia) otras empresas a competir para tener mejor servicio y menor costo del boleto. No sabemos si vamos a lograrlo, pero desde las organizaciones sociales, comisiones barriales y en nuestro caso la Unión tenemos que seguir luchando y peleando, no solo contra el empresario, sino contra un Estado ausente.
Además remarcó que los empresarios siempre hacen lo que quieren, no sienten presión del Gobierno, entonces cada vez se consideran más poderosos, obviamente en detrimento de los usuarios.
Desde la Unión de Comisiones hemos presentando un proyecto para modificar los artículos de la Carta Orgánica pero faltó voluntad política, ya que es difícil conseguir el aval y acompañamiento de diez concejales para aprobar esa modificación. Es necesario poder debatir en el Concejo, no solo las tarifas, sino también los recorridos de las líneas, indicó Morel.
El dirigente vecinal dijo que el proyecto que presentamos contaba con la firma de medio Posadas. Otro proyecto que presentamos es un llamado a licitación pública, donde solamente se necesita la mayoría simple en el Deliberante, pero ninguno de estos proyectos fueron tratado.
Este es un sistema perverso, bien estudiado, que se convirtió en una ley para tres municipios, sin que ningún diputado hiciera o haga algo para, al menos, intentar derogar la ley, finalizó Morel.
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